Redacción El Coahuilense
Los Obispos no estamos para hacer pactos, porque no tenemos la autoridad, ni nos corresponde hacerlos, “solo hacemos lo que nos toca en situaciones donde la inseguridad, la agresión, la violencia y la impunidad afectan el corazón de la sociedad: la familia y es una pena que la Iglesia tenga que mediar en este problema”.
Lo anterior lo subrayó categórico el Obispo de Saltillo, Hilario González García, al manifestar que ellos únicamente hacen un llamado al Gobierno y al crimen organizado a que se pueden superar las situaciones que enfrentamos para que “No podemos ir más allá que estar a favor de las personas que tienen dificultades para trabajar, para ganar su sustento, para ir a estudiar, para transportarse o para poder tener un negocio. Buscamos la paz para las personas que son violentadas”, agregó.haya respeto y paz social.
Recalcó, “los Obispos no estamos para hacer pactos con… si ustedes se fijan el clima del dialogo es sobre que necesitamos paz y conversión. Es un llamado al Gobierno, a las autoridades, incluso a las personas que se dedican al crimen organizado a que se puede llegar a tener respeto a la persona y a la paz social”.
De la misma manera, apuntó que también los Obispos solo le entran a la chamba que les corresponde y tratan de que se pongan lo medios para que esos malos ambientes, sobre todo en Guerrero y en el Estado de México, donde también hay lugares difíciles, se arreglen con dialogo, reconciliación y respeto.
Sobre el hecho que los Obispos sean los que han tenido que mediara en esta situación tan delicada que prevalece en el país, el prelado manifestó que es una pena que la Iglesia tenga que hacer esto.
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Señaló que por ello han comenzado a recibir críticas porque dicen que se están metiendo en política y que andan en buscan otro interés.
“Pero no, solo buscamos el interés de la paz social, de la reconciliación y el dialogo porque la gente de nuestra Iglesia, o algunas otras que no lo son, están sufriendo, porque se afecta desde la familia, los barrio, el trabajo y la educación”, dijo.
Sobre la marcha en defensa de la democracia, el Obispo de la Diócesis de Saltillo, afirmó que esa es una inquietud ciudadana por tener elecciones con democracia, respeto y paz, que es algo legítimo porque como mexicanos no queremos divisiones y confrontaciones.
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