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Por Ethel Arredondo
Torreón, Coahuila.- Con un mensaje de protesta enmarcado en un corazón, hecho de papel lustrina rojo brillante, María Elena Salazar Zamora marchó este 10 de mayo desde la Plaza Mayor hasta la Alameda Zaragoza de esta ciudad.
Se aferraba a esa frase que tanto ella como otras madres buscadoras gritaron durante su recorrido: “¿Por qué los buscamos? Porque los amamos”.
Desde hace casi 14 años María Elena busca a su hijo Hugo Marcelino González Salazar, quien desapareció el 20 de julio del 2009.
“Él siempre fue muy cariñoso y detallista. En fechas como mi cumpleaños y día de las madres siempre tenía un detalle para mí. Y siempre me dejaba notitas cuando llegaba muy tarde de trabajar, pues no lo veía en todo el día. Si han sido muchas entrevistas hablando de él, es muy difícil, pero a la vez sirve de catarsis y sacar todo ese dolor acumulado”, comparte.
En el 2009 Hugo tenía 24 años. Se había graduado en Mercadotecnia en la Universidad Autónoma de Coahuila. En una de sus notas que le escribía frecuentemente a su mamá María Elena, expresó su pesar por no darle los suficientes besos debido a falta de tiempo.
“Te mando mil besos, los que quizá no te he podido dar por las prisas…TKM”, escribió en su nota.
“Sin verdad, sin justicia”
A más de una década de distancia, hoy junto a madres que siguen viviendo el sufrimiento de no saber el paradero de sus hijos, María Elena alza la voz y comparte los recuerdos vivos que tiene de Hugo Marcelino, uno de sus tres hijos.
Ante la llegada de un nuevo proceso electoral y cambio de poderes, lamenta que los candidatos a la gubernatura de Coahuila no tengan propuestas que les brinden esperanza de que las condiciones para las víctimas por desaparición forzada, cambien.
“Si bien fueron nuestros hijos desaparecidos, hace más de 14 años o 15 años, hoy también vemos que nuestras compañeras están desapareciendo, ocurre básicamente en todo el país”, lamenta.
La mamá de Hugo Marcelino fue una de las primeras integrantes de Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila (FUUNDEC), hoy convertida en vocera. Ahí ha encontrado el acompañamiento que nunca pensó que le daría la fuerza para no desistir.
“Siguen nuestros hijos sin llegar a casa. Desgraciadamente se han dado acontecimientos de compañeras que han sido privadas de su libertad, privadas de su vida, a causa de esta exigencia que tenemos de la localización de los nuestros. Sin embargo, nosotros con esa fe y esa confianza, y ese cariño y amor que tenemos por nuestros hijos, continuamos… De verdad que el día que se llevaron a nuestros hijos, se llevaron tanto, tanto, que hasta el miedo nos quitaron”, expresa a los medios de comunicación en su arribo a la Alameda Zaragoza.
Comparte que las madres buscadoras siguen expuestas, y “el gobierno realmente no está cumpliendo con su trabajo”.
“Vivimos en un país, sin verdad, sin justicia. Ya hemos tenido también aquí amenazas. Mantenemos un estado de impunidad. Los gobiernos llegan con las promesas, pero no las cumplen. No hay noción de lo que realmente vivimos en el país, un país de injusticia, un Estado fallido que no garantiza la seguridad, ni de nosotros ni de nadie”, refiere.
Fue así como festejó este 10 de mayo del 2023 su “Día de las Madres”, acompañada de otras madres buscadoras, alzando la voz y extrañando con el amor de siempre los detalles de su Hugo.
“¡Nada que celebrar!”
Durante la marcha que el pasado 10 de mayo realizaron las madres de familia del colectivo FUUNDEC –de la Plaza Mayor hasta el Árbol de la Esperanza en la Alameda Zaragoza de Torreón– gritaron sus sentidas consignas por sus hijas e hijos en desaparición y dijeron cada uno de sus nombres.
¡No hay nada que celebrar! ¡Este día no es de fiesta, es de lucha y protesta! ¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos! ¡¿Por qué los buscamos?, porque los amamos!, fueron los mensajes que escribieron en corazones de papel.
El monumento ubicado justo frente al nuevo Árbol de la Esperanza plantado en la Alameda, es de acero, con huecos como parte de su diseño. Las mamás buscadoras explicaron que se trata de los vacíos que les dejó la desaparición forzada de sus hijos e hijas. Este 10 de mayo llenaron esos espacios con sus fotografías.
FUUNDEC integra a un aproximado de 500 madres o familiares afectados que buscan a sus seres queridos.
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