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Un sonoro abucheo y bien merecido fue la mejor forma para terminar el partido entre Santos y Atlas. Ese momento en el TSM reflejó a la perfección lo que pudo vivirse en 90 minutos sin emociones y con muy poco de cada club para llevarse el triunfo. Ni Laguneros ni Rojinegros ofrecieron un buen juego en la apertura de la tercera jornada del Apertura 2023 y todo terminó en un aburrido empate entre hermanos. 0-0 final.
Duelo de Grupo Orlegi y en la visita hubo motivación extra. Brian Lozano y Eduardo Aguirre quisieron herir a su ex equipo a la ofensiva. “El Huevo” mostró su acostumbrado desequilibrio y lo intentó con disparos lejanos, mientras que el Mudo apareció con algunas opciones, pero el portero Gibran Lajud detuvo lo poco que le llegó a su meta.
Los Rojinegros fueron mejores y tuvieron opciones para abrir el marcador, pero no estuvieron finos. Las ausencias de Julio Furch y Julián Quiñones podrán pesar a lo largo del torneo. Poco a poco Santos niveló, quiso tomar la iniciativa, pero el juego no explotó en emociones.
El primer tiempo ofreció poco. Mucha intensidad y poca claridad. La más emocionante fue del equipo local. Duvan Vergara quiso marcar, mandó un disparo con efecto, sólo que el esférico pasó por un lado. El guardián Camilo Vargas suspiró aliviado y no hubo más.
El tiempo siguió en marcha en el complemento, pero no pasó absolutamente nada importante en el terreno de juego. Emerson Rodríguez pudo darle la ventaja a los Guerreros, pero la claridad no estuvo de su lado. ¿Llegadas claras? Hubo muy pocas en 90 minutos de juego. Y no es es que los porteros Camilo Vargas y Gibran Lajud hayan tenido mucha actividad. Ambos fueron pocas veces exigidos y su uniforme salió casi impecable.
El partido fue luchado, lleno de intensidad entre equipos hermanos, pero ninguno pudo abrir el marcador, ni siquiera tuvieron intención de hacerlo y quedarse con los tres puntos en Torreón.
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