Ana Castañuela
Por Ana Castañuela
El ayuntamiento de Saltillo invirtió más de 40 millones de pesos en una obra peatonal en el Centro Histórico de la capital de Coahuila que carece de los permisos necesarios, causó daños a recintos históricos, tuvo un retraso de 50% y es de difícil tránsito para los peatones.
En diciembre de 2022 el alcalde de Saltillo, José María Fraustro Siller, en compañía del gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís y del director de Desarrollo Urbano de Saltillo, José Antonio Lazcano Ponce, presentó el proyecto Paseo Capital.
Según el director de Infraestructura y Obra Pública, Virgilio Verduzco Echeverría, en la obra se invirtieron 35 millones de pesos. Su objetivo: reconfigurar el Centro Histórico de Saltillo y convertir en peatonales sus calles del primer cuadro.
Durante los trabajos se intervino una superficie de cuatro mil 620 metros cuadrados en las siguientes calles: Juárez, entre Bravo e Hidalgo y entre Hidalgo y Allende; Victoria, entre Allende y Morelos; Padre Flores, entre Victoria y Abbott; y Ocampo, entre Allende y Padre Flores.
En abril de 2023 comenzaron formalmente las obras y en un acto celebrado el 20 de septiembre Riquelme, Fraustro Siller y el gobernador electo Manolo Jiménez inauguraron “el nuevo sello de Saltillo”.
Retrasos
El 14 abril de 2023 la Dirección de Infraestructura y Obra Pública dio a conocer la Convocatoria EO-805030989-N2-2023 para la licitación de Paseo Capital.
La licitación se declaró desierta y el 24 abril se adjudicó de forma directa a Constructora La Hibernia, de Alberto Peart García, por 25 millones 741 mil 123 pesos para la construcción de andadores y equipamiento en Paseo Capital, según datos de Transporte Digno Saltillo, colectivo que mediante solicitudes de Transparencia recopiló la información.
De acuerdo con lo establecido y en función del contrato de la obra que comenzó el 24 de abril, el proyecto en las áreas peatonales debió concluir en julio. Sin embargo, la obra tuvo en retrasó de casi 50% y concluyó a mediados de septiembre.
“Las áreas peatonales debieron concluir el 25 de julio. En función del contrato, como constructor te puedes retrasar y las cuestiones meteorológicas también afectan. Incluso la misma ley lo contempla y te pueden dar hasta un 25% más del tiempo establecido. Sin embargo, Paseo Capital se excedió casi un 50% en el retraso”, explica Marco Polo Hernández Muñiz, representante de Transporte Digno Saltillo.
Al finalizar la obra, Verduzco Echeverría, director de Infraestructura y Obra Pública, mencionó que se invirtieron 35 millones de pesos en la construcción de Paseo Capital.
Sin embargo, tras recopilar datos mediante diversas solicitudes de Transparencia e Información, Transporte Digno Saltillo calculó que la inversión total de Paseo Capital fue de al menos 41 millones 400 mil pesos.
El desglose es el siguiente: en subterranización de infraestructura Telmex, 299 mil 785 pesos; semaforización, dos millones 798 mil 348 pesos; Andadores y equipamiento, 25 millones 741 mil 123 pesos; alumbrado público, tres millones 936 mil 927 pesos; subterranización de instalaciones eléctricas, dos millones 959 mil 885; cambio de tomas en tubería en la calle Padre Flores, cuatro millones 470 mil 247, y construcción y colocación de una estatua esculpida por Alejandro Fuentes Gil, un aproximado de un millón 200 mil pesos.
Sin permisos y con daños
Paseo Capital es una obra aledaña a diversos edificios históricos, entre ellos el Recinto de Juárez, la Catedral de Saltillo, la Facultad de Ciencias Sociales, el Convento Franciscano, la Iglesia de San Esteban y el Teatro García Carrillo. Debido a ello la obra debió contar desde su inicio con la autorización del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Hernández Muñiz hizo una solicitud de información al INAH Nacional con el propósito de corroborar que la obra contaba con autorización para restaurar bienes muebles y bienes muebles asociados al patrimonio cultural (permisos INAH-06-001) o con el permiso INAH-02-002-D que aprueba trabajos en monumentos históricos, inmuebles colindantes a un monumento histórico, e inmuebles que no son monumentos históricos ni colindantes a éstos, pero que están localizados en zonas de monumentos históricos.
El INAH respondió que no cuenta con ninguna solicitud de autorización INAH-06-001 e INAH-02-002-D para obras en el Templo San Esteban, ubicado en la calle de Victoria, Padre Flores y Ocampo -parte de Paseo Capital- o en algún otro sitio en las cercanías del mismo.
El arquitecto Carlos Espinosa de los Monteros Aburto, urbanista y experto en remodelación de edificios históricos, asegura que en diciembre de 2021 fue contactado por Fernando Pérez Charles, director de Infraestructura y Obra Pública para hacer el diseño original de Paseo Capital.
Señala que dejó el proyecto en febrero de 2023 pues durante el proceso de construcción hubo diversas irregularidades y errores técnicos en la obra que causaron daños en diversos recintos históricos de Saltillo.
Justo en ese mes el director de Obras Públicas anunció el comienzo de los trabajos de remodelación y reposición de líneas de servicios de las calles Padre Flores, Ocampo y un tramo de Abbot con motivo de Paseo Capital.
Espinosa de los Monteros asevera que durante los trabajos de reposición de las líneas de servicio se dañó el sótano de ladrillo del Teatro García Carrillo, ubicado en la calle Juan Aldama, entre Padre Flores y Abbot.
El 17 de abril se cerró la calle Benito Juárez para continuar con la construcción de Paseo Capital. En el área se rellenó el pavimento y el nivel de las banquetas y el área peatonal se elevó aproximadamente 40 centímetros, por lo que “prácticamente enterraron la Catedral de Saltillo”, señala el arquitecto.
La Catedral Santiago Apóstol (Catedral de Saltillo) quedó al mismo nivel del área para los peatones y hay un desnivel de 10% entre el Casino de Saltillo, la Catedral y el Recinto de Juárez. Ello hace que el agua corra con dirección a la Catedral ubicada del lado derecho de la calle. Es probable que durante las lluvias el agua se filtre por una de las puertas.
“Al momento en que subieron el nivel del paso peatonal el agua se mete; la solución que dieron fue poner una rejilla del ancho de la puerta y un tubo que sale a la calle de Bravo. Sin embargo, esto no alcanza a desaguar cuando hay mucha humedad o agua. Entonces el agua se puede meter al bautisterio y hasta las criptas, causando daño a un patrimonio histórico”, expresa Espinosa de los Monteros.
Más aún: debido a la elevación del suelo se cubrieron los desagües pluviales del Recinto Juárez y la Facultad de Ciencias Sociales de la UAdeC, ubicados en la calle Benito Juárez, así como de la Parroquia San Esteban, ubicada entre las calles Padre Flores y Victoria. Ello provoca que el agua quede estancada y se genere humedad en los edificios.
El urbanista denuncia que antes de colocar el piso, éste se preparó mediante sand blast, un proceso que utiliza un abrasivo para limpiar la superficie o que la acondiciona para posteriormente recubrirla.
“El pórfido es un cuarzo. Al momento en que lo sandblasteas eliminas partículas de cuarzo que son como cristales. Esos se incrustan en los pulmones y la gente empieza a tener problemas respiratorios y de salud”, explica.
Asegura que las autoridades correspondientes no advirtieron de este riesgo a los residentes de la zona centro ni a quienes transitaban por ahí. Además, los trabajadores estuvieron expuestos al polvo sin ningún tipo de protección especial, poniendo en riesgo su salud.
“No hubo ningún aviso sobre qué se iba a hacer. Empezaron a hacerlo los mismos trabajadores. Hay vídeos en los que ellos no tienen ninguna protección. Estaban trabajando así. Entonces dañaron también al trabajador”, lamenta.
Peatones en riesgo
Desde el anuncio del proyecto, el colectivo Transporte Digno Saltillo ha monitoreado las obras para verificar que cumplan con los requisitos básicos en favor del derecho a la movilidad de los peatones.
El colectivo denuncia que Paseo Capital afecta en primera instancia la movilidad de las personas con discapacidad visual y motriz. Después de realizar diversas pruebas con personas en silla de ruedas, comprobó que la excesiva inclinación de algunas de las rampas dificulta subirlas.
En cuanto para las personas débiles visuales o ciegas su tránsito es difícil pues las tiras podotáctiles carecen de continuidad en el cruce de calles, no logran distinguirse por la textura del suelo rocoso que se colocó, y hay postes y bancas atravesadas en su camino.
“Por lo menos de Hidalgo a Bravo pude encontrar la línea, pero al llegar a la esquina de Hidalgo para cruzar la calle, al bajar ahí ya me perdí. No hay una continuidad, no está recto el seguimiento y supongo que está más cargada a la izquierda la línea y no la localicé, me perdí”, explica la maestra de la Asociación Amever, Luz María Ramos Gil, quien es débil visual e intentó transitar por Paseo Capital mediante el uso de la tira podotáctil.
Las tiras podotáctiles que se colocaron son de material vidriado, pese a que el Reglamento del Centro Histórico, Zonas e Inmuebles Protegidos del Municipio de Saltillo, en su artículo 36, establece que “en las banquetas no se permite el uso de materiales vidriados o similares superficies pulidas o acabados que pueden propiciar accidentes”.
En cuanto a la seguridad de tránsito del peatón, los bolardos (postes) están colocados encima de las banquetas y no en el arroyo vehicular para proteger al peatón al momento de cruzar las calles.
“No existe tampoco infraestructura sanitaria ni infraestructura verde, lo que causa que la permanencia en Paseo Capital no sea prolongada (…) Cualquier proyecto de movilidad debe ser transitable, accesible, inclusivo seguro y disfrutable”, expresa Hernández Muñiz, representante de Transporte Digno.
Asegura que las autoridades han sido evasivas para contestar las diversas denuncias que se han hecho respecto a los daños a los recintos históricos y los riesgos que representa Paseo Capital para los peatones.
Mediante el Derecho de Petición, el colectivo Transporte Digno solicitó a la Comisión de Derechos Humanos obtener los contratos completos de la obra y supervisar que no existan anomalías y se hayan utilizado los materiales y recursos adecuados.
A su vez, recopilan firmas de ciudadanos para exigir la reconstrucción de Paseo Capital con el propósito de que sea un espacio seguro y transitable para todos los peatones.
El Coahuilense solicitó entrevistas con el director de Infraestructura y Obra Pública, Virgilio Verduzco Echeverría, y con el director de Desarrollo Urbano de Saltillo, José Antonio Lazcano Ponce, para conocer sus posiciones ante las diversas denuncias. Sin embargo, al cierre de edición no hubo respuestas.
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