Piedras, Negras, Coahuila.- La Secretaría de Salud de Coahuila instó a la población a no alarmarse después de la confirmación de un nuevo caso de malaria en una mujer migrante venezolana de 22 años en Piedras Negras, marcando el segundo diagnóstico de esta enfermedad en el estado.
La paciente, que transitaba por la región y se alojó brevemente en el albergue Frontera Digna, ha generado preocupaciones de salud pública, aunque los expertos enfatizan que el riesgo de contagio es mínimo.
La malaria es una enfermedad que no se trasmite de persona a persona sino a través de mosquitos infectados por lo que con las medidas de prevención adecuadas y el control sanitario ya implementado, como fumigaciones en áreas de riesgo, aseguran un bajo potencial de propagación.
Julio Garibaldi Zapatero, líder de la Jurisdicción Sanitaria número 01, asegura que la situación está bajo control, destacando que la mujer afectada permaneció solo una noche en el albergue.
Al respecto, las autoridades sanitarias han implementado cercos epidemiológicos y proporcionado atención médica necesaria, calmando temores de un brote.
Este caso es el segundo registrado Coahuila, ya que hace unos días se informó sobre una menor infectada con malaria en Monclova, pero que evolucionó favorablemente.
Ambos casos, según Garibaldi Zapatero, son importados de regiones endémicas de la enfermedad, lo que sugiere una limitada propagación en Coahuila.
«A pesar de ser la primera vez que detectamos este tipo de resultados en nuestra comunidad, instamos a la población a mantener la calma. Contamos con personal calificado, equipo médico y recursos suficientes para enfrentar esta situación», aseguró.
Cabe señalar que las autoridades de salud locales también siguen monitoreando los posibles casos de malaria en la entidad, no obstante, aseguraron que cuentan con todo el equipo necesario para hacerle frente.
Sigue leyendo:
Con información de Periódico La Voz | QT
Síguenos en