Redacción El Coahuilense
Tanech Sánchez, mexiquense ya naturalizado en Coahuila donde echó raíces desde que fue delegado de Morena, finalmente consiguió la delegación de la Secretaria de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), dependencia esta que manejará ingentes recursos en virtud del plan de obras que incluye renovación de la carretera 57 y Tren Saltillo-Nuevo Laredo, además de los programas de mantenimiento regular.
La codiciada delegación, sin embargo, no manejara los dichos recursos directamente aunque sí supervisará su ejecución en obras, lo que no deja tanto margen como algunos suponían para el chanchullo y el regenteo contractual.
La chamba, sin embargo, es importante y codiciada entre cuadros morenistas en el reparto que asumen les corresponde en cuanto a delegaciones federales que, a partir de esta semana, se estarán ocupando.
En el círculo rojo local se empezó a manejar la idea de que Luis Fernando Salazar –y algún despistado dijo que hasta Cecilia Guadiana—estaba detrás de la designación, pero nada más alejado de la realidad pues el amarre, anote usted, de Tanech Sánchez es con Néstor Núñez, director de Vinculación y Patrimonio de la SICT y su amigo personal, así como de la subsecretaria de Prevención de Violencia, Esthela Damián Peralta.
O sea, Tanech se debe localmente a sí mismo y, si acaso el aliado y hombre que le es cercano es Antonio Attolini Murra, con quien ha hecho equipo pero nada qué ver con quienes ocupan escaño senatorial que siguen en las mismas, con Bienestar en el team Guadiana y nada aun para el team Salazar.
Sobre Attolini y Hurtado
Por cierto que, en el pasado informe legislativo de Lus Elena Morales, Attolini y Alberto Hurtado quedaron hombro con hombro en el sillerío, aspecto logístico este que no pasó desapercibido para quienes realizamos esta columna por la aparente incomodidad de los dos morenistas.
Pero resulta que no fue un error logístico sino la travesura de un invitado más, pues de acuerdo a personal de la organización del acto, había colocado a una persona entre ambos pero, el muy diablillo cambió las etiquetas para dejarlos juntos.
¿Quién fue el travieso?
Excusa de Díez de Urdanivia
Muy seria llegó a la sesión de la Comisión de Selección para el Consejo de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción. Apenas se instaló y la abogada Luz María Diez de Urdanivia pidió excusarse de la entrevista a su cuñada, Larissa Estefanía Esparza, la primera aspirante a evaluar esta vez en dicha comisión.
No fue el caso de Rebeca Boone pues, en rigor, no tiene ningún lazo de consanguinidad con la aspirante a la que, en primer etapa evaluó y en segunda, también.
Descarrilan a Aldrete
En medio de la sucesión en la dirigencia estatal del PAN, la diputada Claudia Aldrete parecía ir bien en el acuerdo que, ayer anunciamos, estaba por consumarse en las cúpulas panistas. Quizás en un intento por convencer a los últimos indecisos, la legisladora hizo de todo para mostrarse como la idónea.
Se fue vestida de azul y estrenó curul en vicepresidencia; recibió flores en plena sesión y se las llevaron a la Mesa Directiva; se aventó un punto de acuerdo sobre la lentitud en los cruces internacionales y… ahí empezó el desastre.
Por principio de cuentas, el argumento de la diputada no fue por el público, sino que puso como ejemplo su caso, consistente en que cada mañana debe llevar a sus hijos a la escuela en Del Río, Texas y tarda mucho en cruzar. Argumento este poco sensible para las mayorías que pagan el salario legislativo pero también inconsistencia discursiva para quien defiende la educación, la seguridad y las condiciones del estado en virtud del encomio a la alianza por la que llegó a diputada.
Y ahí está el otro factor. La legisladora fue refutada por el morenista Antonio Attolini, a quien en respuesta ella señaló de ser plurinominal. El lagunero le reviró, primero, que ella llegó por los votos del PRI, recordándole que su votación albiazul rondaba el 2% distrital y el 6% estatal. Luego, le admitió que sí, que en efecto era plurinominal como también el coordinador de la bancada PRI-PAN-UDC.
Desde su curul, un distraído Carlos Robles Loustaunau, a.k.a. “Don Carlos”, volteó de inmediato al escuchar su nombre y con cara de “yo qué”.
La esquina blanca
A la que le fue bien –ya lo decíamos ayer—es a Edith Hernández Sillas, la diputada panista. Como si fuera contienda en tatami, se fue de blanco en oposición al azul de su compañera de bancada.
A la siniestra de Gerardo Aguado, Hernández Sillas conservó la circunspección y compostura mientras veía hundirse a su amiga y rival.
Caso VQueens
La jueza Zayra Francisca Martínez Cervantes lo volvió a hacer y, en una decisión favorable para una jovencita víctima de violación resolvió mantener en prisión preventiva domiciliaria al entrenador del club de futbol americano femenil, VQueens.
El asunto termina por revertir la laxitud de otra juzgadora que hace 10 meses desestimó pruebas y testimonios en contra del preparador físico, gracias al trabajo del visitador judicial, Gerardo Ontiveros Rentería pues fue él quien, en diciembre, recomendó retomar el asunto y vincular a proceso al acusado.
La agresión a la joven –quien en al momento del ataque tenía 15 años– ha sido un escándalo en el ámbito deportivo saltillense pues el agresor es ampliamente conocido en diferentes circuitos de crossfit, tochito, futbol americano, e inclusive, como preparador físico, de manera que actualmente se le ubica como uno de los entrenadores del Club Deportivo San Isidro, al que la defensa de la víctima ha llamado a que dicte una incapacidad para que de manera preventiva se evite el riesgo para otras jóvenes.
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