La reducción de los volúmenes de agua que se tendrán para el ciclo agrícola 2024, la falta de créditos suficientes, los pobres resultados alcanzados en sus cosechas, los bajos costos en la comercialización de sus productos, sin coberturas ni garantías, la posibilidad de que sean embargadas sus plantas despepitadoras, sin los suficientes apoyos de estado y municipios, el olvido de la federación, todo ello tiene prácticamente acorralados y atrapados en la incertidumbre a miles de productores laguneros.
Y es que a raíz de la confirmación del comité técnico y el Distrito de Riego 017 de la reducción en el volumen que se extraerá a las presas para el ciclo agrícola 2024, donde se reducen 150 millones de metros cúbicos de agua, ya desde ahora se da por un hecho que 10 mil hectáreas se quedaran sin ser sembradas.
En este sentido el presidente de la Cámara Agrícola y Ganadera de Torreòn, Marcelo Valdez Quintanilla, confirmó que este ciclo agrícola primavera verano será de solo 800 millones de metros cúbicos, será un reto para todos los productores ante la sequía que se atraviesa pues no cayó el agua necesaria o suficiente para el sector social y la pequeña propiedad, a los dos nos pega parejo.
“Hoy tenemos que hacer más con menos agua, pues si bien en septiembre del 2022 nos cayó mucha agua en las presas, en el 2023 no se dio este fenómeno y de ahí la reducción en los volúmenes a extraer”, precisó.
Para todo el sector agropecuario la situación se complica, pues muchos de los granos o de los alimentos para los animales tienen que ser traídos de otras partes de la república, y eso los convierte en productos mucho más costosos, se encarece la producción de una hectárea de alfalfa, sorgo y granos, recalcó.
“Lo que vamos a tener que hacer es comprar más cantidades de semilla para que se reduzcan los precios, aunque están un poco más altos, hoy el tipo de cambio está bien, pero todo está mucho caro que antes de la pandemia del COVID”, aseveró el presidente de la cámara agrícola y ganadera de Torreón.
Los fertilizantes, semillas y el diésel son otros de los factores que han encarecido la producción de una hectárea, podemos hablar de que hoy una hectárea de alfalfa o de sorgo te saldrá 40 por ciento más caro.
En este sentido el dirigente de la Confederación Nacional Campesina en Coahuila, Natividad Navarro Morales, expresó “la situación es desesperante, ya fuimos a tocarle la puerta a SADER para que nos abra la puerta en la ciudad de México y nos ayuden antes de que esta situación nos lleve a la quiebra y a perder nuestras plantas despepitadoras en La Laguna”.
“La semilla de algodonero fue un fracaso, los rendimientos de producción se redujeron al cincuenta por ciento, estamos tratando de renegociar los créditos para que no nos embarguen nuestros despepites, la verdad nuestros productores están desesperados por no contar con el respaldo del gobierno federal”, recalcó el líder cenecista.
Es urgente que la federación (SADER) nos ayuden con las coberturas para la siembra del algodón y que se revise la importación de la semilla a sembrar en forrajes y algodonero, pues en 2023 nos quebraron, expreso Navarro Morales.
En el 2023 se establecieron con el agua de las presas un total de 63 mil hectáreas y para este 2024 con esta reducción en el volumen de agua se reducirán unas diez mil hectáreas.
LO QUE LES CUESTA SEMBRAR UNA HECTÁREA
De acuerdo con los últimos reportes de la Secretaría de Agricultura, Secretaría de Desarrollo Rural en Coahuila y de los productores, estos son los costos para poder establecer una hectárea de forrajes, algodonero y melón en la comarca lagunera de Coahuila y Durango.
En el caso del algodón su costo de operación desde que se inicia hasta que culmina su cosecha le representa al productor una inversión de 60 a 65 mil pesos por hectárea, el cual le deja un rendimiento de 5.5 toneladas, suficientes para realizar 8 a 9 pacas de algodón.
Para los meloneros de los llamados intermedios (normales) una hectárea de cosecha debe andar en los 70 a 80 mil pesos con un rendimiento de 35 a 40 toneladas por hectárea
Y finalmente está el caso de la producción de los forrajes o la alfalfa donde el costo por hectárea anda en los 35 mil pesos.
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