Torreón, Coahuila. – La tarde del 28 de agosto del 2015, Alejandra Vidaña Muñoz, de entonces 18 años de edad, avisó que iba a la tienda de la esquina de su casa, en la colonia Moctezuma, pero nunca regresó y lleva casi 9 años desaparecida.
El pasado miércoles cumplió 27 años de edad, pero su familia no pudo celebrar, abrazarla para felicitarla ni organizarle una fiesta, pues no saben dónde ni cómo está, pero la siguen buscando.
Su tía, Carmen, comentó que la vieron por última vez con su novio, un hombre mucho mayor que la joven.
“Eran alrededor de las 3 de la tarde de aquel 28 de agosto cuando salió a la tienda, comentó que iba a comprar un refresco, sin embargo, ya no volvió. En ese tiempo tenía una pareja mayor que también estaba casado. Él declaró que la había llevado al kínder donde iba a inscribir a la hija de Alejandra, que la dejó en el colegio y que ya no supo nada de ella”.
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No obstante, el papá de la pareja lo contradijo, ya que aseveró que los vio juntos en su taller ese mismo día, pero más tarde, en donde le comentaron que irían a un bar en la avenida Bravo.
“Los vio que se iban al bar a la vuelta de donde estaba el taller del papá, en la colonia Centro”.
Cuando se interpuso la denuncia de No Localización, las autoridades fueron a visitarlo y el novio sostuvo su versión del kínder, y nunca lo investigaron ni citaron a declarar.
“Unas vecinas también nos comentaron que vieron que la subieron a un carro”.
De acuerdo con la ficha de búsqueda, Alejandra mide 1.60 metros de estatura, es de complexión media, tez blanca, cabello ondulado y negro, y ojos rasgados y cafés.
Como señas particulares, tiene dos tatuajes en las muñecas con los nombres de Edgar y Ximena, y vestía licra negra y blusa tipo polo color rosa.
“Ruego a Dios volver a saber de ella, la extrañamos mucho, la pensamos y recordamos a diario. La seguimos esperando”.
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