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Piedras Negras, Coahuila.- El padre José Guadalupe Valdés, asesor de la Casa del Migrante Frontera Digna y encargado de Casa Betania, advirtió sobre los peligros que conlleva cruzar el río Bravo, especialmente para aquellos migrantes que optan por no esperar su cita para ingresar legalmente a Estados Unidos.
A pesar de que las casas de atención a migrantes están llenas de personas en espera de su asilo político, es alarmante el número de individuos que deciden aventurarse a cruzar el río, aumentando así el riesgo de tragedias.
Valdés subrayó la peligrosidad del río Bravo en cualquier época del año, y cómo su caudal cambiante puede sorprender a los migrantes con condiciones inesperadas y peligrosas.
«El problema es cuando suelta mucha agua, suele cambiar el suelo del río Bravo, de tal manera que no son las mismas condiciones que se conocen», explicó, evidenciando la incertidumbre y los riesgos asociados al intento de cruce.
Reitero que aunque las casas de atención a migrantes, tales como la Casa del Migrante Frontera Digna y Casa Betania, están al tope de capacidad, ambas están comprometidas en brindar asesoría y apoyo a las familias y personas en busca de asilo político, facilitando el proceso y reduciendo el riesgo de cruzar de manera irregular.
Destacó que recientemente, tres familias ya les dieron cita y «van a cruzar contentos y seguros«, todo de manera legal.
Valdés lamentó que, pese a los esfuerzos por orientar a los migrantes hacia rutas seguras y legales, la decisión de cruzar el río Bravo sigue siendo una constante, poniendo en peligro vidas.
Ante ello, hizo un llamado a la conciencia y a la precaución, recordando que las consecuencias de una decisión apresurada pueden ser fatales.
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Con información de Zócalo | QT
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