Agencia
La Región Sureste de Coahuila, principalmente en Saltillo y Ramos Arizpe, enfrenta un desafío ya que alrededor de 80 mil trabajadores no suman los puntos necesarios para acceder a viviendas de Infonavit, por lo que la Comisión Estatal de Vivienda (CEV) busca soluciones para garantizar vivienda asequible para este sector laboral.
Un ejemplo de esto es el desarrollo del Fraccionamiento Industrial, ubicado en la zona entre Saltillo y Ramos Arizpe, cerca de las instalaciones de General Motors.
Este proyecto contempla la construcción de 465 viviendas con una inversión cercana a los 500 millones de pesos, que incorporará paneles solares para generar su propia energía eléctrica y reducir así los costos de los servicios de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Además, en colaboración con el Programa de Apoyo a la Vivienda Social y con el respaldo de la Comisión Nacional de Vivienda Coahuila, se lleva a cabo un proceso de urbanización en el municipio de Matamoros, donde se han habilitado 300 lotes y construido 75 casas de bajo costo.
Hasta el momento, se han vendido alrededor de 40 de estas casas, con un precio de 415 mil pesos en donde el Gobierno Estatal ha otorgado un subsidio de 43 mil pesos, de acuerdo con Ricardo Aguirre Gutiérrez, director de la CEV.
“Son las primeras en todo el país, de interés social, que tienen baño y medio y son más altas (dos blocks adicionales)”, destacó Aguirre Gutiérrez.
En el Fraccionamiento Industrial, que se encuentra en proceso de urbanización al 65%, todavía quedan alrededor de 70 lotes disponibles que se ofrecen a los desarrolladores a través de la CEV o mediante la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de la Vivienda (Canadevi), con la condición de que no superen los 800 mil pesos.
Cada lote tiene una extensión de 105 metros cuadrados.
Este tipo de programas es el resultado de una colaboración entre la Cámara Nacional de Vivienda en Coahuila, el Municipio y el Estado, y se centra en la creación de viviendas que no buscan obtener beneficios económicos, a diferencia de los proyectos que se enfocan en otros segmentos del mercado.
Las viviendas en estos proyectos tienen un mínimo de 45 metros cuadrados de construcción, dos filas adicionales de bloques, son independientes sin paredes compartidas y contarán con una planta tratadora de aguas residuales.
Además, cada vivienda estará equipada con un panel solar que permitirá a los propietarios evitar los costos del servicio eléctrico, gracias a un subsidio otorgado por el Gobierno del Estado.
También se ofrecen opciones de expansión dentro de un proyecto con un valor aproximado de 500 millones de pesos.
El director de la CEV subrayó que este tipo de proyectos son la alternativa para los derechohabientes en busca de viviendas accesibles y sostenibles.
ES DE INTERÉS
