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Coahuila.- El cierre de la frontera de Estados Unidos por la presencia del “gusano barrenador” ha provocado que cerca de 30 mil cabezas de ganado en Coahuila se encuentren estancadas, por lo que los productores temen que no se puedan exportar hasta el próximo año.
La decisión de cerrar la frontera implica un duro golpe para el sector, que esperaba estas fechas para poner a la venta su ganado.
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Al respecto, el productor local Arturo Valdés consideró que la serie de irregularidades y el tráfico de ganado que se permite en México ha beneficiado a unos cuantos.
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Explicó que en Coahuila se cumplen con todas las reglas y requisitos que marca el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA) para la venta y exportación de ganado.
Esto ha permitido que en la región no existan problemas por el producto que se vende a Estados Unidos, sin embargo, con la nueva disposición los ganaderos se verán más afectado, ya que se estima que en la frontera se tienen de 800 a mil cabezas de ganado listas para pasar.
Asimismo, con el cierre de la frontera el ganado tendrá que regresar a sus lugares, lo que significa una importante pérdida económica para los productores que deberán vender el ganado en territorio nacional o en su caso mantenerlos hasta que habrá la frontera.
Se estima que la frontera podría abrir nuevamente hasta enero de 2025, pero con nuevas revisiones que implican un retraso en la venta.
Con información de Periódico La Voz (DE)
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