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Por Mariana Santos
Hace 155 años se fundó la escuela de Bachilleres “Ateneo Fuente” de la Universidad Autónoma de Coahuila (UAdeC), una institución representativa en el estado y en el país, debido a que fue el primer bachillerato en México.
El general Andrés S. Viesca, gobernador y comandante de Coahuila, ordenó la ley reglamentaria de Instrucción Pública del Estado, que estableció la creación del Ateneo Fuente el 11 de julio de 1867.
Su apertura se llevó a cabo el 2 de octubre de 1867 en la casa número 2 de la calle Juárez y posteriormente ocuparía el ex convento de San Francisco, donde permaneció hasta el año 1933.
El 25 de abril de 1932 se colocó la primera piedra, que dejó un perpetuo recuerdo a las personas que se congregaron en la vasta planicie en la que se construyó el edificio del Ateneo Fuente, que hoy representa una de las joyas arquitectónicas más valiosas de Coahuila y México.
En su momento, el gobernador Nazario S. Ortiz Garza realizó la construcción del edificio que hoy ocupa el Ateneo, creado por el Ingeniero Zeferino Domínguez.
Con motivo de las fechas patrias se llevó a cabo la inauguración del Ateneo Fuente el 15 y 16 de septiembre de 1933. La creación de este bachillerato fue la iniciativa para el surgimiento de la Universidad de Coahuila.
El maestro Víctor Manuel Pérez Ocampo, exdocente de esta institución y periodista, relata las memorias y datos del emblemático Ateneo Fuente.
“Como alumno y maestro te puedo decir que no conozco otra escuela más bella arquitectónicamente que mi Ateneo Fuente, más cálida a pesar de sus grandes muros, grandes pasillos que cuando está en silencio y en paz podrían parecer monacales”, expresó Víctor Manuel Pérez Ocampo.
El periodista menciona que en cuestión arquitectónica el edificio del Ateneo posee una forma de brazos que es extraordinaria y que cuenta con la biblioteca, espacios de maestros muy respetados, la Pinacoteca y el Paraninfo, que por muchos años fue la sede de las mejores obras de teatro que se presentaron en la ciudad de Saltillo, Coahuila.
“Lo viene a inaugurar un ateneísta Manuel Pérez Treviño, que era un hombre muy cercano al presidente Plutarco Elías Calles, y a partir de esos años se convierte en un ícono de la ciudad como figura arquitectónica. En cuanto a educación, no cabe duda que somos lo más antiguo en esta región sureste del país”, resaltó el periodista.
Personajes históricos han egresado de allí, como Venustiano Carranza y otros gobernadores, rectores, escritores y deportistas que destacaron a nivel nacional.
Como ejemplo, en el área deportiva del Ateneo se menciona a Jorge Castro Medina, jugador de fútbol americano que estuvo con los Pumas de la UNAM en 1967 y tiempo después entrenador de los Daneses.
Un dato curioso es que las primeras clases deportivas del Ateneo fueron gimnasia y esgrima. El constitucionalista Venustiano Carranza aparece en las notas de examen de esgrima en 1874.
Víctor Manuel Pérez Ocampo, además de que fue docente, también fue ateneísta y obtuvo logros como ser vicepresidente, capitán del equipo de fútbol americano y participar en los concursos de baile de esa época.
“Las generaciones van cambiando, pero el carácter libertario que nos da la escuela se reflejaba mucho en mis alumnos, esa era la parte bonita ver reflejados a mis compañeros de época o a tu servidor con muchos de ellos”, finalizó.
El Ateneo Fuente es el testimonio de la educación liberal y la transmisión de valores que se muestran dentro de esta institución.
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