Ana Castañuela
Por Ana Castañuela
“Debido al incremento de migrantes en la frontera de Coahuila, luego del anuncio del fin de la emergencia sanitaria por covid-19 y la culminación del Título 42, se espera un incremento en las violaciones a los derechos humanos”, advierte Alberto Xicoténcatl, director de la Casa del Migrante en Saltillo.
Y es que, razona, el Operativo Espejo, implementado por el gobierno de Coahuila en la frontera con Estados Unidos con el propósito de reforzar la seguridad, ha derivado en un incremento de los abusos contra las personas en situación de movilidad.
La razón: las fuerzas de seguridad pública en lugar de perseguir a los traficantes de personas, persiguen a los migrantes para detenerlos.
Xicoténcatl recuerda que en el 2020, después de que el país estableció medidas restrictivas a causa de la pandemia, disminuyó el flujo migratorio en Coahuila. Esto se debió principalmente a que los gobiernos establecieron toques de queda y militarizaron sus fronteras, evitando que las personas pudieran salir fácilmente de sus países.
Xicoténcatl expone que esa baja en el flujo de migrantes en la frontera de Coahuila fue “muy pequeña”. Durante el primer año de la pandemia se mantuvo en 6 mil migrantes, la cifra más baja.
“La baja significativa fue muy pequeña. Fue en un espacio muy corto de tiempo, y la gente empezó a burlar a los guardias de sus países, no de forma masiva, sino que iban saliendo de uno en uno y así iban llegando hasta Saltillo”, expresa.
El año pasado el flujo de migrantes en la frontera de Coahuila llegó a las 10 mil personas.
Xicoténcatl recuerda que en 2021, después de un año de pandemia, los gobiernos empezaron a desmilitarizar sus fronteras y a levantar las medidas restrictivas para combatir el virus. A partir de ello, “la gente ya pudo salir, relativamente con aparente normalidad, y fue cuando nuevamente empezaron a subir los flujos migratorios; en este contexto, ocurrió la caravana haitiana”.
En septiembre de 2021 casi 16 mil haitianos llegaron a Ciudad Acuña, Coahuila. Sin embargo, quedaron atrapados, pues en ese momento Estados Unidos tenía cerradas sus fronteras.
“Uno de los graves problemas era que Estados Unidos tenía completamente cerradas sus fronteras. La gente no podía pedir asilo en ese país, y por eso hubo un incremento de presencia de personas en la frontera porque no había forma de cruzar a Estados Unidos”.
A partir de la pandemia y el cierre de la frontera con Estados Unidos, muchos migrantes comenzaron a ver a México como país destino, y comenzó a ampliarse la posibilidad y la idea de residir en él.
“Siempre habíamos sido un país de tránsito. Muy pocas personas pedían refugio en México o querían permanecer aquí, pues la mayoría seguían con la idea de Estados Unidos”, asevera Alberto.
Pero en esa ocasión, con el apoyo de la Oficina de Naciones Unidas para Refugiados, la Casa del Migrante y la Comisión de Refugiados, muchos haitianos se quedaron a vivir en Coahuila.
“Algunos migrantes lograron establecerse en ciudades como Torreón, y resultaron en casos de éxito, pues sus hijos ya están estudiando, tienen un trabajo estable e incluso han dejado la idea de ir a Estados Unidos”, comenta.
LAS “MALAS PRÁCTICAS”
Xicoténcatl considera que después del incendio en la estación migratoria de Ciudad Juárez que terminó con la vida de más de 40 migrantes, la situación en los centros de detención ha empeorado.
“Lo que pasa en las estaciones migratorias no es nada nuevo. Son malas prácticas que llevan ya muchos sexenios arrastrándose”, advierte.
Denuncia que esas malas prácticas dentro de las estaciones van desde la falta de cumplimiento a su reglamento interno hasta la violencia sistemática y la viola-
ción a los derechos humanos de los migrantes detenidos.
Desde hace casi 10 años se han realizado diversos informes sobre lo que sucede en estos centros, pues casi ninguno posee las condiciones necesarias para dar acogida digna a las personas en situación de movilidad.
Los informes se han presentado públicamente y ante las autoridades competentes en espera de algún tipo de ajuste o cambio, “sin embargo — señala Xicoténcatl– este cambio nunca ha ocurrido”.
“Luego de los sucesos en Ciudad Juárez las estaciones continúan trabajando de la misma manera, e incluso empeoraron”, destaca.
El pasado 10 de mayo se anunció el cierre temporal de las estaciones provisionales, entre ellas las de Piedras Negras y Torreón.
“Desconocemos cuánto tiempo se van a mantener cerradas, y tampoco sabemos para qué o por qué se cerraron de forma temporal, pero eso lo que va a hacer es también incrementar el número de personas en las estaciones migratorias y pues van a volver a colapsar”, plantea.
La estación migratoria más cercana a Coahuila se encuentra en la ciudad Monterrey, lo que, según el director de la Casa del Migrante, podría representar un incremento en los niveles de inseguridad para los migrantes durante su traslado de diversos municipios de Coahuila hacia el estado de Nuevo León.
DEL 42 AL 8
El Título 42 es una orden de salud pública emitida en 2020 por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos con el objetivo de evitar la propagación del covid-19. Esta norma permitía a las autoridades estadounidenses deportar de manera casi inmediata a los migrantes que cruzaban la frontera en búsqueda de asilo.
El gobierno de Estados Unidos dio fin al Título 42 a partir del 12 de mayo. En su lugar entró en vigor el Título 8. Esta ley establece que cualquier persona que sea detenida por ingresar de manera irregular a Estados Unidos será deportada y se le impondrá una prohibición mínima de cinco años de reingreso y un posible proceso penal.
El director de la Casa del Migrante de Saltillo alerta que, desde que se anunció el levantamiento del Título 42, se ha detectado desinformación en los migrantes, pues hasta el momento el gobierno estadunidense no ha aclarado en qué va a consistir la culminación de esa legislación y cómo va a procesar los nuevos casos.
“Lo que ha hecho es incrementar la idea en los migrantes de que la frontera simplemente se va a abrir y van a poder ingresar todas las personas que así lo requieran o necesiten”, destaca.
“La culminación del Título 42 representa mayor concentración de migrantes en la frontera del estado de Coahuila debido a la desinformación y, por lo tanto, representa un incremento de las violaciones a los derechos humanos en todo el país”, agrega.
OPERATIVO ESPEJO
Alberto Xicoténcatl denuncia que en ciudades como Piedras Negras se han incrementado las detenciones masivas violentas, que implican golpes, persecuciones y humillaciones.
El Operativo Espejo, implementado por el gobierno de Coahuila en la frontera con Estados Unidos con el propósito de reforzar la seguridad y evitar el tráfico de migrantes, ha resultado en violaciones a los derechos humanos de los migrantes.
“El programa se estuvo desplegando desde hace ya varios días y esto tiene un incremento en las violaciones a los derechos humanos porque la seguridad pública no está persiguiendo traficantes, está persiguiendo personas migrantes para detenerlas”, insiste.
Además del desplazamiento de las fuerzas de seguridad pública para la detención de personas migrantes, no hay ningún otro tipo de coordinación que contemple para ellos la asistencia humanitaria.
“Hubo algunas declaraciones no oficiales de personajes como Alejandro Solalinde durante su reunión con el presidente López Obrador de que iba a haber un cambio en la política migratoria mexicana, pero ese cambio no ha existido y todo se mantiene exactamente igual”, subraya.
“Como siempre, los migrantes son los que asumen las malas prácticas gubernamentales y serán los que salgan perdiendo en todo este proceso, como históricamente ha sucedido”, finaliza.
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