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Durante su participación en el XXXI aniversario luctuoso de Don Nazario S. Ortiz Garza, la Presidenta de Casa Coahuila, Lilia Esperanza Cárdenas Treviño manifestó este emotivo discurso:
A Don Nazario S. Ortiz Garza
Por la Maestra Lilia Esperanza Cárdenas Treviño
Presidenta de La Casa de Coahuila AC
Don Nazario Ortiz Garza fue un hombre de honor… como padre, ciudadano, ateneísta, coahuilense, cuya memoria estará permanentemente viva entre nosotros, como paradigma para futuras generaciones.
Hoy, en el 31 aniversario luctuoso del exgobernador de Coahuila, Don Nazario S. Ortiz Garza, nos reunimos para recordar la vida y obra de un destacado coahuilense con una profunda visión social, compromiso con la legalidad y un visible sentido humano.
Fue un político que dejó huella no sólo en el estado de Coahuila: Se desempeñó como diputado local en 1924, alcalde interino de Saltillo en 1928, tiempo en el que logró consolidar las finanzas locales y regularizar los salarios de los maestros y de los empleados del ayuntamiento. Regidor y presidente municipal de Torreón, en su gestión se remodeló la Alameda y también se instaló la Fuente del Pensador, como parte de los trabajos de urbanización y modernización del municipio.
Don Nazario fue gobernador de Coahuila del primero de diciembre de 1929 al 30 de noviembre de 1933.
Durante su administración, dado su gran interés y preocupación por la educación y convencido de que ésta nos llevaría a ser un mejor país, destinó importantes recursos a este sector y una muestra de ello es la construcción del nuevo edificio del Ateneo Fuente, por el que hemos pasado numerosas generaciones de jóvenes; reconocido como una de las instituciones educativas de mayor prestigio en el norte del país. Hasta la fecha, el edificio que lo alberga representa una de las marcas estéticas y distintivas del estado por su estilo art decó.
Así mismo, se construyeron en Saltillo edificios muy importantes como las escuelas Coahuila y Álvaro Obregón, consideradas como joyas arquitectónicas de la construcción.
En su gestión como gobernador destacan también obras emblemáticas en el estado como el puente del Río Nazas, que une las ciudades de Torreón y Gómez Palacio, el famoso mercado Benito Juárez.
El estadio de beisbol Revolución en Torreón fue el primero con luz eléctrica de toda América Latina, permitiendo que los partidos se realizaran en horarios nocturnos.
De igual manera, se mejoró la comunicación terrestre en el estado y con ello pueblos y comunidades se integraron a la vida productiva.
En el ámbito federal, fue director de Nacional Distribuidora y Reguladora, S. A. de C.V. (Nadyrsa) de 1943 a 1946, empresa que tenía a su cargo el programa de abasto social de leche, hoy Liconsa. Desde ahí, en defensa de los intereses de los campesinos, frenó a los acaparadores de alimentos e inició la exportación de granos.
Ocupó el cargo de secretario de Agricultura en el gabinete del presidente Miguel Alemán Valdés de 1946 a1952.
Fue un importante empresario que impulsó el cultivo de la vid y su industrialización en Coahuila y en Aguascalientes, con lo cual logró que México se convirtiera en una potencia vitivinícola.
Don Nazario Ortiz Garza es de esas personas que mientras más tiempo pasa, más se le reconocen sus grandes valores humanos, como persona íntegra y congruente con su tiempo, libre de egoísmos profanos, aferrado a un sentido de utopía como meta a alcanzar, con la que solo viven los hombres de bien, con bondad y generosidad, libertad de pensamiento, fue un ser humano extraordinario, sembrador de ideas y de proyectos que con sus actos escribió páginas de responsabilidad y honradez en la historia de Coahuila, Aguascalientes y México. que demuestran la vida y el desarrollo del hombre que cumple con su responsabilidad y del ciudadano que sabe servir a la patria.
Hace casi 67 años, el 3 de noviembre de 1955, Don Nazario Ortiz Garza, junto con Alejandro Romo Medina, Jesús Rodríguez de la Fuente, Fernando González Calderón, Rubén Aguirre Elguezabal, Eduardo Hernández Elguezabal y Gustavo Cárdenas Huerta, todos ellos ilustres coahuilenses, decidieron fundar la Casa de Coahuila, en la ciudad de México.
Tal y como lo concibió Don Nazario S. Ortiz Garza, la Casa de Coahuila es hoy el corazón de los coahuilenses en la ciudad de México, un lugar de reunión para realizar eventos sociales, culturales y filantrópicos.
Como cada año, justo en este día se realiza en casa Coahuila, una ceremonia luctuosa en su honor.
En este 31 aniversario de su fallecimiento, deseo aprovechar la ocasión para agradecer a su familia a mi querido amigo Mario Ortiz Rodríguez Presidente del Consejo Consultivo de la Fundación Nazario S. Ortiz Garza y a su presidente Víctor Hugo Flores Arizpe, el mantener viva la flama de su memoria. Esa, es la verdadera inmortalidad. Como decía Don Nazario ´´Las personas mueren cuando el olvido las oculta´´
En este día tan importante, estoy doblemente agradecida como ateneísta y como presidenta de la Casa de Coahuila, por permitirme dirigir estas palabras en honor de un gran coahuilense como lo fue don Nazario.
En esta conmemoración quiero destacar la inclinación de Don Nazario S. Ortiz Garza por la enseñanza y hacer un llamado a todos los presentes, para que desde nuestras esferas trabajemos por despertar vocaciones y llevar el conocimiento al progreso, por un México mejor.
Debemos enseñar a las nuevas generaciones que el aprendizaje es continuo y permanente, que es necesario ser autogestivos en su formación, que es necesario “aprender a aprender”, aprender a ser, aprender a ser ciudadanos activos y participantes en los problemas de su comunidad, de su ciudad, y aprender a convivir y ante todo aprender a respetar a los demás.
Debemos apoyar a los jóvenes para desarrollar el pensamiento crítico, las aptitudes para la comunicación, la conducta propicia para tomar parte en actividades comunitarias, desarrollar la afectividad, adquirir competencias sociales y fomentar la empatía.
Debemos participar activamente en estas responsabilidades; hemos de ser primero ciudadanos del mundo, nosotros mismos debemos ser capaces de practicar el aprendizaje a lo largo de toda la vida, ser transmisores de conciencia ética y moral, para ser merecedores y artífices del nuevo México que anhelamos para nuestros descendientes.
Aquí retomamos los argumentos iniciales para manifestar que DON NAZARIO ORTIZ GARZA puso una importante semilla, que a lo largo de los años ha dado unos frutos y néctares en los que hemos libado muchas generaciones. Es un orgullo para mi ser Nazarina.
Es cuanto
Saltillo Coahuila a 10 de octubre de 2022
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