Redacción El Coahuilense
Torreón, Coahuila. – Este 19 de junio se cumplen 14 años de la desaparición de Héctor Armando Tapia Osollo, quien fue sacado de su domicilio por un grupo armado en Torreón.
Su esposa, Ixchel Mireles, informó que se desempeñaba como gerente de Desarrollos Urbanos Rime S.A. de C. V. (DURSA), en donde tenía 10 años con el puesto.
La noche que se lo llevaron, indicó, había acudido a una cena en el Hotel Camino Real frente al Parque España, invitado por Caterpillar.
“Y llegó a la casa como a la 1:20 de la mañana y me estaba contando cómo le fue y con quién estuvo platicando y cenando”.
En ese momento, se escuchó un fuerte golpe en la puerta y alrededor de 10 hombres armados ingresaron y lo “levantaron”.
“Puse denuncia, pero nunca buscaron en Caterpillar, yo sí fui a preguntar a qué hora se había ido mi marido de ahí, pero la Fiscalía no. Yo di datos de las casas del 2010, de lo que había en las constructoras y no porque las constructoras o ingenieros estuvieran involucrados, sino que era el 2010, un año muy peligroso”.
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Comentó que hay líneas de investigación que por seguridad de su familia y ella no las hace públicas.
“Pero la Fiscalía lo sabe y el tema siempre es que hay mucho peligro”.
Sobre su marido, consideró que ya no está vivo, pues vio la manera en que se lo llevaron y trataron.
“Lo único que me queda a mí es exigir justicia y verdad a la Fiscalía, pues ellos tienen que buscarlo y encontrarlo. Quiero saber la verdad. Él tenía mucho futuro por delante”.
Ixchel Mireles forma parte del colectivo Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila (FUNDEC).
“Fui varios años con los gobernadores Moreira hasta que terminaron sus administraciones. Después en las mesas de trabajo estuve en la Mesa Forense, de la cual me salí porque para el teatro no sirvo y no me gustó cómo se estaban llevando las cosas”.
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