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Saltillo, Coahuila.- Tras la muerte de un interno presuntamente maltratado en un anexo, el monseñor Hilario González hizo un llamado a los encargados de estos centros de rehabilitación para que aseguren un trato digno a las personas que confían en ellos para superar sus adicciones.
El obispo subrayó que, aunque en teoría estos centros buscan ayudar a las personas a liberarse de sus adicciones, en algunos casos se han reportado prácticas de maltrato bajo la justificación de corregir con fuerza a los internos.
Recordó que muchos de estos anexos predican la palabra de Dios, pero lamentó que algunos recurran a métodos agresivos y deshumanizantes.
«El trato con las personas vulnerables o que están en esta situación de dependencia de fármacos o sustancias debe ser de ayuda para salir de ello, y ojalá que las técnicas o terapias no sean agresivas ni deshumanizantes, sino todo lo contrario, que les ayuden a salir precisamente de la deshumanización», señaló Monseñor González.
Finalmente, el prelado enfatizó la necesidad de que los centros de rehabilitación, aunque bien intencionados, adopten metodologías que respeten la dignidad humana de los internos, contribuyendo así a su verdadera recuperación.
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(Con información de Zócalo). DA
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