Piedras Negras, Coahuila.- La llegada de deportados a la frontera norte de México es el foco de atención desde que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó nuevas órdenes ejecutivas el pasado lunes tras su investidura.
En Piedras Negras, 20 personas fueron recibidas en tres camionetas del Instituto Nacional de Migración (INM), entre las que se encontraban niños, quienes fueron repatriados junto a sus familiares, mientas que en Acuña solo han llegado 19 personas hasta el momento.
Por su parte, el secretario del ayuntamiento, Héctor Alberto De Luna, aclaró que estas no forman parte de las deportaciones masivas anunciadas, sino que se incluyen dentro del acuerdo de repatriación segura y ordenada, que establece un límite de 60 deportados.
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Ante la posibilidad de un aumento en el número de deportados, el municipio está listo para movilizar a los afectados a centros de atención en Allende, Sabinas y Nueva Rosita.
Los deportados en Acuña provienen principalmente de Guanajuato, Guerrero, Zacatecas, Michoacán y Coahuila.
De estos, 15 habían cumplido condenas penales en Estados Unidos, mientras que 4 fueron deportados por cuestiones migratorias.
Además, 10 de ellos han solicitado apoyo al INM para obtener un descuento en el transporte a sus destinos, mientras que el resto se trasladará por sus propios medios.
Las autoridades municipales anticipan un incremento en el flujo de deportados y continúan implementando medidas para asegurar una atención integral a todos los afectados.
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Con información de Capital Coahuila
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