Redacción El Coahuilense
Piedras Negras, Coahuila.- La iglesia católica Sagrado Corazón, ubicada en la Villa de Fuente de Piedras Negras, ha sido víctima de actos vandálicos por segundo día consecutivo, lo que ha causado gran preocupación y consternación entre los feligreses y la comunidad local.
Este domingo, las autoridades del templo reportaron un nuevo incidente en el que individuos desconocidos ingresaron al recinto sagrado, generando daños considerables y robando diversos objetos de valor.
De acuerdo con el reporte, los intrusos accedieron al templo a través de una puerta lateral que da acceso a las oficinas, donde también se encuentran las instalaciones del comedor destinado a los sacerdotes.
Entre los objetos robados se incluyen cámaras de vigilancia, ropa sacerdotal y vino de consagración, este último consumido por los delincuentes antes de huir.
🗞 | Suscríbete aquí al newsletter de El Coahuilense Noticias y recibe las claves informativas del estado.
Este hecho ha generado una fuerte indignación entre la comunidad, no solo por el robo de objetos religiosos, sino porque representa el segundo ataque en menos de 48 horas.
A pesar de los operativos de búsqueda desplegados por las autoridades locales, los responsables aún no han sido detenidos.
La Agencia de Investigación Criminal se encuentra llevando a cabo las diligencias necesarias para esclarecer los hechos.
💬 | Únete a nuestro canal de WhatsApp para que recibas las noticias y trabajos destacados de El Coahuilense Noticias.
Además, el padre Juan Armando Renovato, responsable del templo, ha interpuesto una denuncia formal, aportando videos de seguridad que registraron la primera incursión.
Monseñor Alfonso Miranda, obispo de la Diócesis de Piedras Negras, expresó su profunda preocupación ante lo sucedido y anunció que, aunque el templo ya contaba con cámaras de vigilancia, se instalarán alarmas adicionales para reforzar la seguridad del recinto religioso.
Asimismo, hizo un llamado a las autoridades para que se investigue a fondo y se haga justicia ante estos actos que han afectado profundamente a la comunidad creyente.
El doble ataque ha dejado a la comunidad en un estado de alerta, pues temen que estos incidentes puedan repetirse si no se toman medidas inmediatas para garantizar la seguridad del templo.
TE RECOMENDAMOS LEER:
Síguenos en