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Alrededor de 300 metros de boyas acuáticas flotantes planean ser instaladas este lunes en el río Bravo, al norte de México y fueron aguardadas en Shelby Park, para verificar si se cuenta con los permisos locales y federales para su colocación.
Ante la jurisdicción federal, se proyectó usar un embarcadero de la Patrulla Fronteriza, por ello, cinco camiones de carga las dejaron a 200 metros de la rampa de acceso, por la que bajan los aerobotes.
Tanto las autoridades y los contratistas se han limitado a informar la técnica que será utilizada para anclar las boyas acuáticas, pues serán un obstáculo a la corriente natural de agua.
También podrían afectar el libre tránsito de la fauna silvestre, pues miden 1.21 metros de alto y están reforzadas con alambre de púas; además que se colocarán en tramos de seis metros unidos de forma continua, en un tramo de más de tres kilómetros. Hasta el momento, los grupos ambientalistas no se han pronunciado al respecto, a pesar de que se espera que hoy inicie la instalación.
El gobernador de Texas, Greg Abbot, anunció hace unas semanas que se colocarían estas boyas como parte de las diversas acciones que han implementado en la franja fronteriza entre Eagle Pass y Piedras Negras.
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