Redacción El Coahuilense
Por Álvaro Delgado Gómez
Hace 18 años José María Aznar vino a meter las narices en México para apoyar a Felipe Calderón y ahora la que trata de sacar del hoyo a Xóchitl Gálvez es Cayetana Álvarez, también una derechista española, invitada por el magnate Ricardo Salinas Pliego como parte de una guerra abierta contra el presidente Andrés Manuel López Obrador para no pagar los multimillonarios impuestos que debe.
Salinas Pliego, quien ha desplazado en protagonismo al también oligarca opositor Claudio X. González Guajardo, trajo a México a Cayetana Álvarez, la aristócrata líder de la extrema derecha española, para llamar a la rebelión empresarial contra López Obrador, quien apenas la semana pasado le ofreció una quita de 8 mil millones de pesos de deuda.
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“Yo animo a los empresarios mexicanos a seguir el ejemplo de los que sí alzan la voz, porque también los hay. Sin ir más lejos nuestro anfitrión de este magnífico evento, Ricardo Salinas, a quien le doy doblemente las gracias por su valentía y por su invitación”, agradeció Álvarez a Salinas Pliego, presente en su participación, el sábado 9, en el “Festival de las Ideas”, en Puebla.
Y con la misma insolencia de Aznar para apoyar a Calderón, en 2006, Álvarez aclamó a la candidata de la derecha de México:
“Aprovecho, si me permiten, para enviar también desde aquí un saludo cordial, y con admiración, a una mujer que no tiene miedo y que tiene un proyecto desde las antípodas del populismo de unir para vencer y vencer para unir, que es Xóchitl Gálvez”.
Esta intromisión de Cayetana Álvarez, como la de Aznar en 2006, es la forma de actuar de un engranaje multinacional de derecha de la que forman parte organismos y personajes como Enrique Krauze, Mario Vargas Llosa, Felipe Calderón y el propio Salinas Pliego.
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Cayetana es vicepresidenta internacional de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), que preside Aznar, que a su vez forma parte de Atlas Network, el organismo que agrupa a los ultracapitalistas del mundo, cuyo presidente para América Latina es Roberto Salinas León, primo de Salinas Pliego.
Una de las empresas del Grupo Salinas que forman parte de Atlas Netwotk es “Caminos a la Libertad”, encabezada por el comentarista Sergio Sarmiento, ligada también al “Centro Ricardo B. Salinas Pliego”, a través del cual el magnate ha establecido una alianza con Enrique Krauze.
A Atlas Network pertenece también la Fundación Internacional para la Libertad (FIL), que preside Mario Vargas Llosa y que anualmente organiza, el Foro Atlántico en Madrid. El año pasado reunió, el 20 de junio, en la mesa “Autoritarismos, populismos y desafíos para la libertad” a Cayetana y Krauze, cuyo moderador fue Salinas León, el primo de Salinas Pliego.
Otro organismo que pertenece a Atlas Network es el Instituto Atlántico de Gobierno, presidido por Aznar —donde Felipe Calderón da clases—, y que acoge la Universidad Francisco de Vitoria, que pertenece a la congregación la Legión de Cristo, fundada por el pederasta mexicano Marcial Maciel Degollado.
¿Qué tienen en común todos estos organismos, además de su ultracapitalismo? Que son parte del escándalo de los “Pandora Papers”, la filtración de millones de documentos, en 2021, que exhibieron a empresarios, políticos y personalidades públicas que ocultaban su dinero en paraísos fiscales para no pagar impuestos o lavar dinero.
No es fortuito, entonces, que Salinas Pliego haya traído a México a Cayetana Álvarez para impulsar a Xóchitl Gálvez, cuya campaña en redes a su favor ha sido impulsada por Atlas Network, con sede en Washington y que utiliza su poder para desestabilizar gobiernos que no garanticen sus privilegios.
De hecho, la abierta guerra de Salinas Pliego contra el gobierno de López Obrador tiene que ver con la negativa de este magnate, el tercer hombre más rico de México, a pagar los impuestos miles de millones de pesos de impuestos y la pérdida de privilegios.
En Puebla, Salinas Pliego perdió un presupuesto multimillonario que subsidiaba “La ciudad de las ideas” y que después de que se fugó a Israel Andrés Roemer, el organizador, se denominó “Festival de las Ideas”, junto donde Cayetana participó el sábado.
El panista Rafael Moreno Valle le asignó, desde 2012, cientos de millones de pesos para ese capricho de Salinas Pliego y su amigo Roemer, quienes también recibieron recursos del gobierno de Peña Nieto.
Todavía el morenista Miguel Barbosa le autorizó a Salinas Pliego 35 millones de pesos para la edición 2022. Y antes, para 2021, también se le había asignado una cantidad igual para tal evento, además de otros 35 millones de pesos para la organización civil “Poder Cívico”, de Roemer, cuyas cuentas bancarias fueron congeladas tras su huida a Israel por acusaciones de abuso sexual de mujeres.
Esos privilegios se le acabaron a Salinas Pliego en Puebla y, sobre todo, ahora debe pagar los miles de millones de pesos de impuestos por parte de la autoridad federal. Esto es lo que lo tiene en pie de guerra…
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