Redacción El Coahuilense
Desde el anuncio que presumía la instalación de Tesla en Santa Catarina, Nuevo León, los terrenos del libramiento la Carbonera, así como del Óscar Flores Tapia se dispararon al 300%, de acuerdo con las estimaciones del alcalde de Arteaga, Ramiro Durán.
Siguieron los parques industriales y luego las zonas residenciales de Ramos Arizpe y el norte de Saltillo, que dispararon su valor. Lo mismo las rentas, cada vez más inalcanzables para la clase media, inclusive la más acomodada de la región.
De por sí, desde mayo, hay una parálisis en el sector, de acuerdo con agentes de bienes raíces que ese mes atribuían el parón en la incertidumbre asociada a las elecciones. Pero la crisis continuó y la fiebre tesliana mantuvo los precios muy por encima de las capacidades, imposibilitando el acceso a compra o renta de una propiedad.
Ahora, con la aparente cancelación del proyecto santacatarinense, nadie quiere volver a los precios justos, sin entender que la fiebre ya pasó. Lo cierto es que quizás sea el momento de recuperar la cordura y dejar un poco –sólo un poco—la especulación.
Presea Saltillo, ausencias
Hoy se entrega la Presea Saltillo. Como se sabe, los ganadores son el restaurantero Juan Ramón Cárdenas Cantú y, a nivel institucional, la Universidad Autónoma del Noreste.
La presea post mórtem se concederá a las familias del doctor Eduardo Dávila, padre de la primera dama de la ciudad, así como a la familia del extinto empresario y político, Armando Guadiana Tijerina.
El acto no ha tenido crítica por las designaciones, por el contrario, hay consenso en los merecimientos de los elegidos. Acaso sí se han mencionado las ausencias: por un lado, la post mórtem que faltó es la del pintor Eloy Cerecero, a quien, sin embargo, a finales del año pasado se le otorgó la Presea Manuel Acuña. El artista falleció en agosto de 2023.
En tanto, a nivel institucional, la CTM reclama la falta de reconocimiento a su contribución para la estabilidad laboral. Nadie hizo eco a Jesús Berino y Tereso Medina, pues, en todo caso, al primero se le olvida el papel que ha jugado desde que hizo sus pininos en la huelga Cinsa-Cifunsa de 1974 y que, para el círculo rojo, lo hace merecedor de una presea pero al esquirolaje.
Sabinas a estrados
Hoy se resuelven las impugnaciones de Múzquiz, San Juan de Sabinas y Sabinas en el Tribunal Electoral de Coahuila, siendo el tercer municipio mencionado el más intrincado y, sin embargo, el proyecto no modificará el resultado.
Se trata de los expedientes promovidos por MC, PT y UDC, respectivamente, contra el resultado de la elección del ayuntamiento, celebrada el pasado 2 de junio, que dio como ganador al candidato del Verde.
Como se ha venido adelantando en este espacio, todo se encamina a la confirmación del resultado, o dicho sea en jerigonza electoral, a la aprobación del cómputo de la elección de los integrantes del ayuntamiento y la validez de la elección.
Hay que confiar que “el hombre de la pachorra jurisdiccional”, Sergio Díaz, logre sacar más expedientes esta misma semana.
Explicación no pedida
Por cierto, la alcaldesa de Sabinas, Diana Haro Martínez, salió a desmentir un chisme de Facebook y, a través del aparato comunicacional oficial, se refirió a un portal de noticias –así en genérico– en el que, se dolió, la atacan con difamaciones y violencia política en razón de género.
Aún más. Lamentó que haya portales que publican rumores sin pruebas y fundamentos que buscan polarizar a la gente, sembrando el odio y el desprestigio. Inclusive, se centró en el alegato de género para llamar a las mujeres a defender (la) y ofreció sus declaraciones patrimoniales como prueba de su integridad. Lo cierto es que fue imposible localizar las dichosas declaraciones en el sitio oficial del ayuntamiento.
La cuestión se hizo obvia: ¿de qué o quién estaba hablando la alcaldesa? Todo inició por una pregunta en un post de Facebook que, palabras más o menos, deslizó: “¿qué matrimonio acaba de comprar el Merco con todo y estacionamiento?”.
Bastó eso para que el Facebook se llenara de nombres que, en algún momento, empezó a reproducir los de Diana Haro y su esposo Eleazar Villarreal Willars, lo que fue retomado en algunos medios locales de comunicación.
Sobra decir que la aclaración resultó peor para la alcaldesa.
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