Círculo Rojo: Los cuatro extraditados

febrero 28, 2025
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Ofrenda de buena voluntad, a escasas horas de que se consume el plazo para imponer aranceles a la producción nacional, el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum envió un contingente de mexicanos de los que hay que sentirse poco orgullosos.

Claro está que el asunto se encuentra en todos los medios del país, pero en el caso de Coahuila, hay al menos cuatro criminales que fueron identificados como generadores de la peor época de inseguridad y violencia de que se tenga memoria.

Entre los extraditados directamente a Washington D.C. están los hermanos Treviño Morales, Omar y Miguel Ángel, conocidos como Z-40 y Z-42, respectivamente. Ambos son considerados autores de horrendos crímenes que mayoritariamente no se han esclarecido, pero se apunta a ellos como los principales líderes de esa organización criminal.

Además, aparece en el listado Jesús Alberto Galaviz Vega, el Z-13, quien se supone controlaba el narcomenudeo. Y también Miguel Ángel Rodríguez Díaz, “Alfa Metro”, a quien se le atribuye la jefatura en el norte de Coahuila, especialmente en el trasiego de narcóticos. El primero va a San Antonio, el segundo a McKinney, ambos en Texas.

Las dudas sobre el paradero de miles de desaparecidos es su legado, las vidas cercenadas su reguero de dolor. Sus complicidad en el sector público y el sector privado de la entidad, prevalecen en las sombras. A ver qué les sacan los güeros.

Breve apunte de la elección

Ya quedó el calendario para conocer a quienes se postulan a jueces y magistrados a nivel local. Son 106 cargos y tendrán un período breve de promoción: 20 días para magistrados y 10 días para jueces. Claro que el hecho de que el 70% de los aspirantes sea candidato único facilita las cosas para una campaña breve, tan breve como este comentario.

Qué llevaditos

Luz Elena Morales dijo que era informe de la Legislatura; pero soltó los datos de su propia actividad legislativa y, finalmente, el acto se reveló priísta con la aparición del diputado, coordinador de bancada y dirigente estatal del PRI, Carlos Robles Loustaunau, a.k.a. “Don Carlos”, a escena.

Haya sido lo que haya sido, el evento reunió a la clase política coahuilense, sobra decirlo, principalmente del PRI, lo que queda del PAN, pero también de Morena.

No se sabe quién se encargó de la logística, o sea, del acomodo de lugares y todo eso, pero a propósito de los morenistas fue particularmente llamativo ver que sentaron muy juntitos a Alberto Hurtado y Antonio Attolini ¡Qué llevaditos!

“También canta”

Evento de Mejora y Ayuntamiento de Torreón, chalecos verdes, la entrega de una techumbre en el ejido La Paz, todo muy convencional en la concentración que, sin embargo, dejó ver a la síndica, Natalia Fernández, en plan animadora, cantando con ganas “Querida socia”.

Se dice que la política requiere algo de histrionismo y hasta ahora no se le había visto esa faceta a la síndica excepto porque apenas hace unos meses se ganó el resentimiento de muchos por su modos de diva.

Esta vez, Natalia Fernández soltó el chorro de voz, compartió el micrófono con las asistentes y ante la sorpresiva intervención, entre chalecos verdes surgió una voz que con cierto tonillo (no se sabe si era afirmación o interrogación) dijo: “¡Ah! También canta”.

Vocinglero universitario

Tal parece que las complicaciones de la comunidad universitaria le hacen mucha gracia al rector Octavio Pimentel Martínez. Marca de su gestión, envió a emisario de cierta familiaridad en el ecosistema mediático, para clarificar que la caída del Microsoft Teams registrada en días pasados era asunto menor y risible.

Proclive al reduccionismo de los problemas, el rector (o su emisario) son incapaces de distinguir Microsoft Teams de Campus Agreement y de estos dos con Microsoft 365, algo que el ciudadano común no está obligado a saber pero ¡vaya! es él quien no tendría que devanarse los sesos para el distingo porque, si bien se le desconoce ejercicio profesional, algo habría de saber siendo ingeniero, catedrático, exdirector de facultad y habiéndose encargado hasta hace un año de la Vinculación e Innovación en la casa de estudios.

Afortunadamente para la comunidad universitaria la plataforma quedó estable después de las líneas publicadas en este espacio donde, superado el trance y más allá de la torpeza del vocinglero, volvemos a nuestras temáticas habituales, especialmente ahora que el nepotismo (así sea oficioso o extranominal) es tema nacional.

Padura en Torreón

Una serie de coincidencias afortunadas entre los pocos políticos con capacidad lectora deviene en una serie de actos afortunados: Leonardo Padura, el aclamado escritor cubano llega a Torreón para presentar su libro “Ir a La Habana”.

Todo inició por la amistad que Lucrecia Martínez tiene con el autor de “El hombre que amaba a los perros” y que ya en el pasado reunió a varios enamorados de Cuba y de la obra de Padura, entre ellos, Eduardo Olmos Castro.

Olmos es de esos políticos cada vez más escasos que poseen un amplio bagaje intelectual: lo mismo devora libros que sabe de arte plástico, realiza recorridos por lugares que lee en alguna novela (lo hizo precisamente con la obra de Padura) y sabe de cine como pocos. (En una ocasión, por ejemplo, a propósito de sus 50 años, se impuso la tarea de ver la película ganadora del Óscar de cada año desde el de su nacimiento).

Como la visita del autor cubano es un acontecimiento para quienes gustan de la ficción, el abanico se fue abriendo y a la convocatoria se sumó el secretario de Gobierno, Óscar Pimentel González, que es otro lector asiduo, entusiasta en su apreciación estética pero que, pocos lo saben, es auténticamente un erudito de las novelas del creador de Mario Conde.

No fue casualidad que una de las mejores gestiones culturales que se hayan tenido en Saltillo fuera precisamente durante la alcaldía de Pimentel González quien, aun menos lo saben, es un ensayista con espléndidos textos no publicados.

Con la iniciativa de doña Lucrecia en marcha para realizar la presentación en lo que es ya su gran aportación a la historia lagunera, como lo es el Instituto de Música de Coahuila, se invitó a Luis Jorge Boone, el escritor monclovense que es uno de los más conocidos autores contemporáneos que haya parido esta tierra.

Román Alberto Cepeda se animó a patrocinar parte del evento, mientras que el rector Octavio Pimentel aprovechó para convocar al taller “Cómo escribir una novela”, que Padura viene dictando en esta gira por México.

La cultura pues, sella alianzas, deja atrás desencuentros y los episodios que a veces parecen convulsos, ante el arte, se atemperan.

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