La propuesta de crear una Fiscalía Especial para las Mujeres y la Niñez, enviada ayer al Congreso local por el gobernador Manolo Jiménez Salinas, no pudo ocurrir en un momento más polémico.
El mensaje del mandatario, comunicado oficialmente por su administración, consiste en cumplir un compromiso de campaña y, también, empatando la idea que al respecto tiene en su serie de iniciativas por realizar la presidenta Claudia Sheinbaum.
Pero el círculo rojo, así como es, le ha dado una lectura coyuntural, pues hay dos casos que impactan a grupos políticos muy poderosos de sexenios pasados en las regiones sureste y La Laguna, como lo son los ya conocidos, Caso Topo y Caso Profe Mario, ambos relacionados con violencia física contra las mujeres.
El Caso Topo tiene una relación directa con el grupo que en la universidad encabeza Alfonso Yáñez Arreola, cuyo esplendor ocurrió en el gobierno de Rubén Moreira, mientras que el lagunero está directamente relacionado con las facciones comarcanas.
Para que no quepa duda sobre la seriedad del tema, la iniciativa –creada por Katy Salinas, a quien se le comisionó el proyecto desde marzo– fue presentada de manera inusual por una comitiva encabezada por el secretario de Gobierno, Óscar Pimentel González, quien llegó acompañado de las mujeres integrantes del gabinete y de la presidenta honoraria del DIF, Liliana Salinas Valdés y, naturalmente, no llegó a la ventanilla de la Oficialía de Partes, sino directamente a Luz Elena Morales, la líder cameral, quien, por cierto, es una de las expertas en legislación en materia de género. Así o más claro.
Caso Topo. Día 6
El caso llega hoy a un primer desenlace con la realización de la audiencia inicial en la que se determinará si el exdiputado priísta, Aldo Martínez, consigue quedar en libertad o deberá enfrentar el proceso en prisión.
Durante la audiencia se intentará imputar al detenido por violencia familiar, un delito que es susceptible a la acumulación de otros, por ejemplo, el de lesiones, que al parecer fueron graves, e inclusive, las amenazas proferidas contra los policías.
Habrá que ver los alegatos del ministerio público y hasta dónde puede sostenerlos, lo mismo con la medida cautelar que, se dice, pedirá un brazalete electrónico, frente a una defensa que es integrada por el penalista Adolfo Ramos Vázquez, Alegría Martínez (hermana del acusado) y Anel de la Rosa Padilla, quien hasta hace poco era empleada del Centro de Empoderamiento para las Mujeres.
Facultad acosadora
La noche del miércoles, la Facultad de Jurisprudencia emitió un breve comunicado informando que había dado de baja a un maestro, así, sin identificar, por el asunto de acoso.
Se trata del mismo señalado Aldo Martínez, a menos que sea otro, nada raro en una facultad donde el acoso de maestros a alumnas está normalizado.
Tan es así que ayer, Nadia Salas, la titular del Tribunal Universitario, mencionó que en toda la UAdeC hay 42 casos de acoso, abuso o agresión sexual que están abiertos.
La Facultad de Jurisprudencia concentra el 10% de los casos de toda la universidad.
Aún peor. Si se toma en cuenta que, de los 42 casos, unos 30 tienen como víctimas a alumnas en 67 escuelas de la máxima casa de estudios, el porcentaje sube a un 14% de asuntos.
Tropiezos de Yáñez
El mismo señalado, Aldo Martínez, quien presuntamente acosó a una jovencita menor de edad que era su alumna de primer año, como se informó ayer, puede enfrentar un segundo proceso penal.
Pero la Facultad de Jurisprudencia, con el escándalo político y universitario a todo, tuvo una respuesta lamentable del director. Un primer dato que saltó a la vista es que la escuela que dirige Alfonso Yáñez Arreola avisara de una baja cuando un integrante de su Consejo Directivo y parte del mismo grupo de amigos participa en la defensa por el caso familiar antes comentado.
Un segundo dato fue precisado por el secretario general de la UAdeC, Víctor Manuel Sánchez, en el sentido de que hay una medida cautelar del Tribunal Universitario para suspenderlo y prohibir su acceso a las instalaciones. Esto es que, fue el Tribunal, y no la Facultad, el que cesó al presunto agresor.
Si esos dos tumbos no bastaran, hay que añadir que la Facultad de Jurisprudencia tiene un protocolo propio para el proceso de casos como el del acoso a una alumna que, sin embargo, no fue activado.
Como si se tratara de un deslinde anticipado, un esfuerzo por sacarlo del ámbito de influencia de la Facultad, la denuncia fue enviada al Tribunal Universitario sin avisar siquiera a los padres de la menor, aspecto que fue observado por el mismo secretario general.
Otro tumbo fue que mientras el escándalo crecía tras ser informado en esta columna y con la previsión de la coberturas que se habían dispuesto en diferentes medios de comunicación, Yáñez Arreola se fue a festejar el cumpleaños de Manu, el niño genio que el director suele mostrar en sus redes sociales sin observar lo delicado de la publicación de imágenes de menores conforme a la legislación en materia de derechos de infancias.
Los líos de Yáñez Arreola
El escándalo de la Facultad de Jurisprudencia, más allá de la torpe gestión de la crisis, empata con los procedimientos abiertos por la auditoría iniciada la pasada rectoría y que en fechas recientes identificó anomalías por 17 millones de pesos durante la administración de Alfonso Yáñez Arreola.
Ayer, Marisol Díaz, quien es responsable de los servicios en línea de la facultad, y su cónyuge, Alberto Campos Olivo, quien está al frente de los diplomados que ofrece la misma escuela, fueron citados en la Contraloría universitaria para que aportaran información sobre el manejo de los fondos auditados.
Entre el personal de la universidad que atestiguó la cita se tomó nota de las caras largas.
San Pedro del Dengue
La cuantificación de los casos de dengue en San Pedro es imposible debido al subregistro de la Jurisdicción Sanitaria a cargo de la doctora Rocío Quiroz, quien se dice en el ámbito médico, mantiene un subregistro.
La alarma es generalizada debido a que los hospitales y centros de salud de la localidad están desbordados de personas con síntomas a las que no se les da un diagnóstico y en los ejidos es peor, con el caso de San Ignacio como el más perjudicado.
Desde hace semanas el asunto se ha informado en El Coahuilense Noticias, pero la inacción de la Secretaría de Salud así como de los ayuntamientos en los municipios más afectados dejó pasar el momento oportuno para la prevención.
Desde ayer, circula en redes sociales lo único que le queda a la gente: el humor que se expresa en un meme que cambió el nombre de la localidad, San Pedro de las Colonias, por San Pedro del Dengue.
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