Signos vitales: Dilemas energéticos

Por Alberto Aguirre

Con información de primera mano, analistas financieros y expertos en asuntos petrolíferos han validado el plan nacional en materia energética presentado por la secretaria Luz Elena González .

En las páginas de El Economista recientemente han aparecido reportes precisos (Enrique Campos , Marco Antonio Mares , Issac Katz y Pablo Zárate , entre los más notables) sobre los problemas que agobian a Petróleos Mexicanos. La autosuficiencia en la producción de hidrocarburos —coinciden— resulta una meta lejana, con los niveles actuales de producción en Dos Bocas y Salina Cruz.

Las finanzas del gigante petrolero quedaron diezmadas. Y del desastre que fue Transformación Industrial han dado puntual referencia Katz y Zárate en sus recientes colaboraciones para este diario. El nuevo director de Pemex, Víctor Rodríguez Padilla , no es reacio en la aceptación de esta realidad innegable, pero su apuesta para lograr el rescate de la empresa y cumplir con el plan trazado desde Palacio Nacional es audaz, casi utópica, pero asequible en el mediano plazo.

Entre ellas, llevar la producción de gas natural a los 5,000 millones de pies cúbicos diarios (MMpcd). Para lograr esa meta, en una de las primeras acciones de la administración entrante se concluyó la primera sección del gasoducto Ixachi–Matapionche, aumentando la capacidad de procesamiento a 200 MMpcd. Luego, en diciembre pasado, entraron en operación los gasoductos Bakté y Tentok, logrando en conjunto ampliar la capacidad de producción a 8,917 barriles por día de aceite y 18.8 MMpcd de gas. También a fines de año y en tiempo récord, se completó la construcción de la Planta de Acondicionamiento de Gas Húmedo Amargo Papan, ubicada en Veracruz, que acondiciona hasta 300 MMpcd de gas, además de generar más de 2,000 empleos.

Asimismo, pendiente está la entrada en operaciones del gasoducto Xanab en junio se este año, lo que permitirá la producción de 30,000 bpd de aceite y el aprovechamiento de 13.36 MMpcd de gas.

Efectos secundarios

RESCOLDOS. Han pasado 11 años desde que Citigroup y Banamex denunciaron a Oceanografía, lo que llevó a la intervención de la Procuraduría General de la República y que culminó en un concurso mercantil que despojó a Amado Yáñez de la naviera que su familia fundó en 1968. La firma campechana, en su cúspide, empleaba a más de 14,000 personas y generaba miles de millones de dólares, llegó a ser la empresa proveedora más importante de Pemex y, por ende, objeto del deseo de varios funcionarios de ese entonces. A pesar de las acusaciones de un fraude por 6,000 millones de pesos, hasta ahora no se ha demostrado en tribunales ni de México ni en Estados Unidos. Mientras tanto, Yáñez —quien afrontó la acción de la fiscalía peñista— está concentrado en la recuperación de su patrimonio y su reputación, aunque debe remontar pérdidas cercanas a los 30,000 millones de pesos y el reto de recuperar la confianza de clientes y proveedores.

INCENTIVOS. Sin limitaciones presupuestales, Seegene, empresa surcoreana que desarrolló una solución integral para el diagnóstico molecular por PCR, implementó una campaña para defender los objetivos de su Programa de Innovación Abierta. En México han sido cuestionados los métodos para seleccionar a los investigadores y centros sanitarios que recibieron patrocinios de 20,000 dólares para distintos proyectos de investigación. “Seegene no ha ofrecido incentivos ni beneficios para favorecer la compra de nuestros productos”, insistió, “la realización de estos estudios clínicos dentro del OIP no obliga en ninguna forma a los laboratorios a adquirir productos de Seegene”. Esta campaña coincide con las intenciones de algunos de los galardonados de devolver los recursos, ante las reiteradas coerciones de los promotores .

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