Redacción El Coahuilense
Ciudad de México.- Ante las manifestaciones estudiantiles, alumnas de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México compartieron sus posturas y opiniones sobre la reforma judicial del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Hay que recordar que entre los cambios planteados se encuentran: la elección popular de juezas, jueces, magistradas, magistrados, ministras y ministros; la sustitución del Consejo de la Judicatura Federal por un Tribunal de Disciplina Judicial y el Órgano de Administración; la modificación en la integración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación; y nuevas reglas procesales.
El 5 de febrero del 2023 el actual presidente presentó al Congreso de la Unión una propuesta de reforma al Poder Judicial junto con veinte iniciativas constitucionales y ahora está en discusión en el Senado de la República una de ellas: la reforma al Poder Judicial.
Como resultado de este controversial dictamen y de los más importantes que enfrenta México en los últimos años, mujeres defensoras de los derechos humanos, organizaciones de la sociedad civil y estudiantes se pronunciaron por días afirmando que es un retroceso en la igualdad de género ¿Las razones?:
- Removerá del cargo a las mujeres (judicatura) que lograron romper el techo de cristal para alcanzar sus respectivos puestos de trabajo en el Poder Judicial de la Federación (PJF).
- Atenta contra los salarios de las mujeres quienes enfrentan la precarización en el PJF, porque sus ingresos se verán reajustados aún más.
- Remueve a las personas servidoras públicas que han completado capacitaciones y se encuentran especializadas en materia de género y derechos humanos.
- No garantiza una mirada con perspectiva de género a la hora de impartir justicia.
- Causará más rezagos en los casos de mujeres víctimas de todo tipo de violencias.
- La reforma podría atentar contra el derecho al aborto y a otros derechos fundamentales para las mujeres y la lista sigue y sigue.
En contrasentido, la exposición de motivos de la presidencia, afirma que se trata de una renovación estructural para involucrar a las y los mexicanos en la democracia y devolver la “verdadera independencia” a los órganos que imparten justicia.
Qué opinan las estudiantas en la UNAM
Desde la semana pasada, las y los estudiantes han mostrado su apoyo a los trabajadores judiciales. La colectiva Honorosus Medusa de la Facultad de Derecho es una de ellas. Desde hace tres años, son un proyecto que busca la representatividad feminista en una de las “facultades más marchistas” de la UNAM, según la integrante Andrea Pérez.
En entrevista para Cimacnoticias, mujeres de Honorosus Medusa, expresaron que la reforma se está usando como instrumento político para concentrar el mando en un partido, «llevando así al país a una dictadura». De acuerdo con Andrea, la división de poderes ayuda a generar un contrapeso que evita el autoritarismo. Con la nueva propuesta del presidente, se estaría dando mayor dominio al poder judicial.
La segunda preocupación del colectivo es la elección popular de mil 633 magistrados y jueces de distrito en unas elecciones extraordinarias en 2025. Para ellas, es un retroceso, ya que se necesita de una carrera judicial, así como saber interpretar la Constitución Mexicana. Esto solo se logra a través de una especialización, doctorado o maestría en Derecho Constitucional.
“Se quiere hacer pasar como que mientras más se vote más democracia hay, ¿no? Y pues esto no es cierto, o sea, votamos por las opciones que nos dan y muchas veces no significa que nos convengan al 100%, pero es lo que hay”, opinó Michell Miranda.
Las mujeres son uno de los sectores poblacionales más vulnerables para acceder a la justicia. El colectivo prevé que la iniciativa afectará procesos legales y sus derechos, ya que no asegura la perspectiva de género.
Michell Miranda mencionó que en cuanto a la protección de las trabajadoras del poder judicial, solo se hace una mención hacia la paridad de género, pero no establece mecanismos suficientes para su cumplimiento.
El poder local, el verdadero problema
Irene López Faugier, civilista y profesora titular de la Facultad de Derecho de la UNAM, también está inconforme con la reforma judicial propuesta por el presidente. Más allá de los filtros para acceder a estos cargos, ella resaltó que con la elección popular se beneficiará un solo partido: MORENA.
“Evidentemente quienes hemos trabajado en el Poder Judicial nos hemos preparado. No somos políticos en lo más mínimo. Es decir, trabajamos en uno de los poderes de gobierno, pero no influyen las decisiones en el Poder Judicial por parte de los partidos políticos porque ni siquiera estamos vinculados a la cuestión política”, mencionó Irene López Faugier.
Además, Irene considera que la reforma judicial no está enfocada en el poder local, de donde viene la injusticia que trastoca a las y los ciudadanos. Siguiendo los datos de la encuesta sobre la percepción de impunidad en México de la organización Impunidad Cero, el 63% de los encuestados dijo no tener confianza en las autoridades ni en el proceso de denuncia. Desde la implementación del nuevo sistema de justicia penal en 2008, 7 de cada 100 homicidios dolosos se han esclarecido.
Para esta organización, el desconocimiento de los derechos y obligaciones; las autoridades competentes para cada delito; los bajos niveles de supervisión a las fiscalías y procuradurías; los procedimientos lentos y complejos, los delitos cometidos por servidores públicos; y la falta de sanciones, complican el acceso a la justicia.
Otros problemas que explicó Irene López Faugier fueron la sobrecarga de trabajo por no tener suficiente personal en estos organismos y las escasas investigaciones correspondientes.
“El Poder Judicial no deja libre a los delincuentes como es lo que pretenden hacer creer. Se encarga de -en dado caso de que ya haya una sentencia definitiva, por ejemplo, un juez local que dejó ir a un delincuente- emitir un amparo en contra de esta autoridad. Las víctimas del delito van al Poder Judicial Federal, se les atiende y entonces se ordena que los jueces vuelvan a conocer el asunto”, indicó Irene López Faugier
Las voces de las estudiantes
El pasado 28 de agosto, las y los estudiantes de la Facultad de Derecho de la UNAM convocaron a una marcha en contra de la iniciativa a través de folletos y grupos de internet. Junto a otras universidades, se dirigieron al Consejo de la Judicatura Federal.
En un comunicado dirigido a las y los legisladores, se solidarizaron con el paro indefinido de labores del Poder Judicial de la Federación y a su vez, solicitaron ser escuchados. En una segunda marcha, el 01 de septiembre, se dirigieron al Senado de la República durante el sexto y último informe de gobierno del presidente Andrés Manuel Lopez Obrador.
El martes, 3 de septiembre, llegaron a la Sala de Armas de la Magdalena Mixhuica, sede alterna de la Cámara de Diputados, para entregar los derechos de petición que firmaron más de 700 estudiantes; sin embargo, no fueron recibidos.
Para Araceli y Karen en la Facultad de Derecho, «más del 50% de las estudiantes somos mujeres», y aunque históricamente la representación estudiantil ha sido protagonizada por hombres, la presencia femenina ha sido cada vez más notoria. Las estudiantes han estado activas tanto en las aulas como en las marchas y conversaciones sobre la reforma judicial. A pesar de la prevalencia masculina en ciertos espacios, «como mujeres de derecho hemos estado muy atentas y comprometidas, demostrando que nuestra voz y presencia son cada vez más fuertes y relevantes».
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