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CDMX.– La y los aspirantes a representar a Morena en la elección presidencial de 2024 concluyeron 70 días de recorridos por todo el país entre acusaciones cruzadas por supuestos desvíos de recursos para promoción personal, uso indebido del servicio público, acarreo, y hasta señalamientos por pactar para favorecer a ciertos perfiles. Desde hoy y hasta el 3 de septiembre el partido guinda aplicará encuestas a nivel nacional para definir quién será su representante en la próxima contienda federal.
La recta final del proceso de selección interna divide opiniones entre los aspirantes y sus cercanos. El equipo de trabajo del excanciller Marcelo Ebrard Casaubón, por ejemplo, asegura que han denunciado irregularidades en los apoyos a Claudia Sheinbaum Pardo para “cuidar el movimiento de transformación”; mientras que quienes respaldan a la exmandataria capitalina califican las acusaciones como “patadas de ahogado”.
Por otra parte, aliados a los legisladores con licencia Manuel Velasco Coello, respaldado por el Partido Verde Ecologista (PVEM), y Gerardo Fernández Noroña, por el Partido del Trabajo (PT), coinciden en que han competido en condiciones distintas a los morenistas, al menos en cuanto a los recursos invertidos.
La polémica en el proceso de selección interna creció el 16 de agosto, cuando Ebrard Casaubón acusó a la Secretaría del Bienestar y a gobiernos locales de desviar recursos, organizar acarreo, brigadas de publicidad y guerra sucia para perjudicarlo y beneficiar a Sheinbaum Pardo; el exfuncionario también señaló el pago de encuestas falsas.
Además, diputados y diputadas que simpatizan con Marcelo Ebrard advirtieron que denunciarán a la Secretaría del Bienestar ante la Fiscalía Especializada para Delitos Electorales, el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación por el uso irregular de programas sociales en favor de Claudia Sheinbaum.
“Está muy polarizado el tema y no porque nosotros estamos haciendo mal, sino más bien porque hay compañeros que no entienden que este tipo de situaciones afectan profundamente al movimiento porque son situaciones de corrupción. Nos orillaron a hacer todo esto a raíz de que no hubo movimiento por las denuncias que nosotros presentamos en su momento ante la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia, y ante el Consejo Nacional de Morena; [de no denunciar] nos convertiríamos en cómplices ”, dijo Emmanuel Reyes Carmona, uno de los coordinadores del equipo de Ebrard Casaubón, quien asegura que, como él, al menos 80 diputados respaldan concretar las denuncias.
Pese a los señalamientos, Mario Delgado Carrillo, dirigente de Morena, negó la semana pasada que la representación de Marcelo Ebrard haya presentado a Morena pruebas en contra de Claudia Sheinbaum. En respuesta, el excanciller aseguró que entregaron un escrito a Alfonso Durazo, presidente del Consejo Nacional del partido –el órgano interno que delimitó las reglas del proceso interno–. Ebrard subió el tono contra Delgado Carrillo, lo acusó de vivir en “fantasyland”: un mundo de fantasía.
En ese contexto, la semana pasada Claudia Sheinbaum llamó a la unidad y pidió a aspirantes no olvidar lo que le costó a Morena llegar a la Presidencia. El Diputado Miguel Torroco, uno de los promotores de la exjefa de Gobierno, negó las acusaciones por uso ilegal de recursos públicos e insistió en que seguirán buscando la unidad aunque, opinó, Ebrard Casaubón estaría “pavimentando el camino para la ruptura”.
“Son patadas de ahogado, como ya saben que van perder la encuesta quieren intentar ganar en los tribunales lo que no ganaron en las calles con el amor de la gente […]. Mientras Marcelo manejaba tractores o subía lanchas intentando pescar, o quería estar con las vacas, la doctora Claudia Sheinbaum recorría el país. Entonces también hay que ver las estrategias que tomaron, ya se dieron cuenta que se equivocaron y pues intentan ganar a la mala, pero no lo van a lograr”, consideró.
El 17 de agosto, representantes de la y los aspirantes se reunieron por más de cinco horas para definir las encuestadoras que aplicarán cuatro cuestionarios espejo al de Morena desde el 28 de agosto y hasta el 3 de septiembre.
El encuentro volvió a evidenciar tensiones entre militantes, pues la Senadora Martha Lucía Mícher, del grupo de Ebrard, se inconformó porque ninguna de las encuestadoras que propuso resultó electa; mientras que el empresario Arturo Ávila, en representación del exsecretario de Gobernación Adán Augusto López, respaldó la propuesta de presentar un listado de empresas que no podían participar. Aunque la petición fue rechazada, en la primer acta del encuentro la dirigencia de Morena no consignó estas discrepancias.
“Era claro que lo que intentaba Mario Delgado con un acta así muy general era dar la imagen, porque se tenía que hacer pública, de que era un proceso terso, de que todos están muy contentos y éramos muy amigos”, recordó Horacio Flores, político de Nuevo León que acudió a ese encuentro en representación del aspirante Gerardo Fernández Noroña. De acuerdo con esta versión, eso abonó a que la Senadora Mícher decidiera no firmar un acuerdo, mientras que el equipo de Ricardo Monreal y Adán Augusto lo hicieron bajo protesta.
Con cuestionamientos a cuestas sobre una posible ruptura, el Senador con licencia Ricardo Monreal acordó ceder su propuesta de encuestadora para que participara una de las empresas considerada por el excanciller Marcelo Ebrard. Pese al gesto, el Diputado Emmanuel Reyes descartó una alianza con Monreal.
“Son patadas de ahogado, como ya saben que van perder la encuesta quieren intentar ganar en los tribunales lo que no ganaron en las calles con el amor de la gente […]. Mientras Marcelo manejaba tractores o subía lanchas intentando pescar, o quería estar con las vacas, la doctora Claudia Sheinbaum recorría el país. Entonces también hay que ver las estrategias que tomaron, ya se dieron cuenta que se equivocaron y pues intentan ganar a la mala, pero no lo van a lograr”, consideró.
El 17 de agosto, representantes de la y los aspirantes se reunieron por más de cinco horas para definir las encuestadoras que aplicarán cuatro cuestionarios espejo al de Morena desde el 28 de agosto y hasta el 3 de septiembre.
El encuentro volvió a evidenciar tensiones entre militantes, pues la Senadora Martha Lucía Mícher, del grupo de Ebrard, se inconformó porque ninguna de las encuestadoras que propuso resultó electa; mientras que el empresario Arturo Ávila, en representación del exsecretario de Gobernación Adán Augusto López, respaldó la propuesta de presentar un listado de empresas que no podían participar. Aunque la petición fue rechazada, en la primer acta del encuentro la dirigencia de Morena no consignó estas discrepancias.
“Era claro que lo que intentaba Mario Delgado con un acta así muy general era dar la imagen, porque se tenía que hacer pública, de que era un proceso terso, de que todos están muy contentos y éramos muy amigos”, recordó Horacio Flores, político de Nuevo León que acudió a ese encuentro en representación del aspirante Gerardo Fernández Noroña. De acuerdo con esta versión, eso abonó a que la Senadora Mícher decidiera no firmar un acuerdo, mientras que el equipo de Ricardo Monreal y Adán Augusto lo hicieron bajo protesta.
Con cuestionamientos a cuestas sobre una posible ruptura, el Senador con licencia Ricardo Monreal acordó ceder su propuesta de encuestadora para que participara una de las empresas considerada por el excanciller Marcelo Ebrard. Pese al gesto, el Diputado Emmanuel Reyes descartó una alianza con Monreal.
El INE estableció un tope de gastos para la y los aspirantes de 5 millones de pesos, pero la dirigencia de Morena no ha mostrado interés por establecer parámetros para regular la propaganda y garantizar una contienda interna más equitativa. El dirigente Mario Delgado sólo se limitó a enviar escritos y hacer llamados a la y los aspirantes y sus aliados para deslindararse pública, política, financiera y jurídicamente de las campañas de publicidad personal.
En ese sentido, Fernández Noroña ha calificado como una “simulación” la transparencia de recursos en la contienda.
“Es una pena que se esté operando de una manera tan vergonzosa un proceso que pintaba para ser limpio en términos generales”, opinó Horario Flores.
Cada aspirante ha defendido sus gastos en estos 70 días de recorridos por el país; Fernando Castellanos asegura que Manuel Velasco es quien menos ha gastado, pues aún no alcanza los 2 millones de pesos, mientras que, tanto Sheinbaum como Adán Augusto López, han asegurado que la asistencia de miles de personas a sus eventos ha sido financiada por sus simpatizantes.
Sobre quienes respaldan a Adán Augusto López pesa un escándalo reciente, la semana pasada una coordinadora de la Secretaría del Bienestar en Baja California fue despedida por la filtración de una llamada en la que habría condicionado la entrega de apoyos económicos a un líder comunitario en Tijuana porque ella y su jefe, el Secretario de Bienestar estatal, estaban con el exsecretario de Gobernación.
Morena llega así, entre cuestionamientos de irregularidades, dudas sobre la transparencia de recursos y con momentos que pusieron en duda la permanencia de al menos uno de sus aspirantes, al levantamiento de la encuesta que definirá a su próxima candidata o candidato presidencial.
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