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Durante los cinco años posteriores al feminicidio de María del Sol Cruz, la actuación de las autoridades en la investigación ha sido una farsa, un gran montaje para proteger a quienes la asesinaron. De aquello no tiene duda Soledad Jarquín Edgar, madre de la fotoperiodista y videasta oaxaqueña, asesinada el 2 de junio en Juchitán de Zaragoza.
“Es una farsa, es una puesta en escena desde lo hecho por el Fiscal Rubén Vasconcelos fundamentalmente (…) Lo que han hecho es una farsa para proteger no solo a los Montero López, sino también a los autores intelectuales y materiales”, destacó. Hoy el caso está en ceros. Ninguna persona detenida y la justicia cada vez más lejana.
Por un lado, la carpeta de homicidio calificado fue sobreseía el 22 de noviembre de 2021, al mismo tiempo la fiscalía abrió una nueva carpeta por feminicidio. Lo último que Soledad Jarquín supo sobre ésta fue lo que le dijo el ex fiscal, Arturo Peimbert Calvo. “Me dijo: no hay nada y lo único que te puedo decir es que te cuides mucho. Esa fue la recomendación que me dio el último día que lo vi, que fue un día antes de que se fuera de Oaxaca (…) ese delito está como entonces, sin resolver”.
En la carpeta por el delito de robo hubo una sentencia de 13 años y 4 meses de prisión contra Heliodoro Altamirano Charis, sin embargo, hasta el momento se encuentra en libertad.
En el caso del delito electoral, está a la voluntad del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO) así como de la Fiscalía Especializada en Atención a Delitos Electorales a cargo de Elizabeth Sánchez González y Aracely Pinelo López, respectivamente. “Tenemos instituciones que no sirven para nada”, señaló la periodista oaxaqueña.
Respecto el de la sanción al entonces titular de la Secretaría de Asuntos Indígenas (SAI), Francisco Montero López, así como a su hermano Hageo Montero, se determinó la inhabilitación por cinco y tres años correspondientemente. La sanción fue completamente desproporcional al daño causado.
“Yo insisto en que todo estuvo mal hecho desde siempre. Hay intereses muy fuertes y por eso fuimos a la CEDAW y está avanzando en el caso. Ya mandó a preguntar al gobierno del estado y la respuesta del gobierno del estado fue ridícula, es para que te mueras de la risa o de coraje”, indicó.
Me quitaron una gran parte de mi vida.
“María del Sol era una chava con mucha alegría, teníamos pasiones parecidas. A mí me quitaron una gran parte de mi vida”, expresó.
A pesar de lo doloroso y revictimizante del proceso Soledad Jarquín, se mantiene firme en la búsqueda de justicia, pues si bien ésta, considera, no va a llegar a través de las leyes y el aparato de estado, la construirá cada día, en cada una de sus palabras, en cada una de las acciones que será para las autoridades una piedra en el zapato.
“Haremos posible la justicia un día. A veces esa justicia creada por los seres humanos no nos va a llegar, pero hemos aprendido a hacer justicia: nombrarlos, no quitar el dedo del renglón, no olvidar lo que nos hicieron y nombrarlos en todos los espacios. Esta es justicia alternativa. Yo ya no creo en las instituciones”, expuso.
A través de un comunicado, la Red de Mujeres Periodistas de Oaxaca (RedMPO) se sumaron a la exigencia de justicia y no impunidad.
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