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Petróleos Mexicanos (PEMEX) mantuvo, por segundo mes consecutivo, su producción de crudo por arriba de la barrera de un millón 800 mil barriles diarios, esto como resultado de la entrada de operaciones de nuevos campos petroleros.
De acuerdo con datos preliminares de la empresa productiva del Estado, al cierre del 29 de enero registró un volumen promedio de un millón 870 mil barriles diarios.
Lo anterior significa que enero es el segundo mes en el que la petrolera se mantiene con un rendimiento considerable en su producción, pues cabe destacar que en diciembre pasado produjo un total de un millón 817 mil barriles diarios.
PEMEX explicó que el incremento en su producción se debe al cambio en el rumbo de la estrategia de inversión que la institución siguió en administraciones pasadas, pues desde diciembre del 2018, se concentró en dirigir y focalizar sus recursos de inversión en áreas donde tenía experiencia y ventajas competitivas: explorar en tierra y en zonas de aguas someras que tenían elevadas probabilidades de encontrar petróleo y que además cuentan con importante infraestructura desarrollada.
Por lo anterior, a tan solo un par de años, los técnicos de PEMEX realizaron importantes descubrimientos de yacimientos de petróleo, entre ellos los campos de Quesqui y Tupilco.
La empresa detalló que otro cambio de estrategia fue acelerar el desarrollo de estos descubrimientos. En tiempo récord se ha logrado el desarrollo de estos nuevos campos para lograr la extracción del petróleo de estos yacimientos, además de utilizar infraestructura ya existente que ha permitido bajar los costos de inversión.
Más producción en nuevos campos
Los cambios implementados han dado como resultado una mayor producción en los nuevos campos, y tan sólo al mes de enero de este año, la aportación de los nuevos yacimientos se ubica en 510 mil barriles diarios, “lo que ha permitido compensar la declinación de producción de los campos maduros”, precisó la empresa.
Cabe destacar que PEMEX adelantó que en las próximas semanas estará incorporando más pozos de producción, los cuales están en la fase final de perforación, con lo cual se garantiza la continuidad de la senda de crecimiento de la producción de petróleo.
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