Redacción El Coahuilense
Ciudad de México.- El Palacio de Bellas Artes abrió por segunda ocasión sus puertas a Silvia Pinal. Hace dos años, fue el homenaje que organizó su hija Sylvia Pasquel por 70 años de carrera. La mañana de este sábado 30 de noviembre, familiares, amigos y público, dieron el último adiós a la diva del cine mexicano en el máximo recinto cultural del país.
Aunque se esperaba el arribo de su nieta Frida Sofía y de su único hijo varón, Luis Enrique Guzmán, ninguno de ellos acudió al homenaje.
Las mujeres de la dinastía Pinal encabezaron una ceremonia discreta, en el recinto rodeado de flores blancas, donde destacaba la corona enviada por Luis Miguel, el padre de su bisnieta Michelle Salas, hija de Stephanie Salas y nieta de Sylvia Pasquel.
Entre vivas y porras, el evento fue más emotivo que solemne. En el vestíbulo lucían una serie de fotografías que inmortalizaron la belleza de Silvia Pinal Hidalgo, una artista “que construyó un puente entre la ficción y la realidad del país, cuyos personajes rompieron el estereotipo que dominaba la época: mostraba mujeres insumisas, irreverentes, sensuales y desafiantes”, como describió Claudia Curiel de Icaza, secretaria de Cultura.
“Gracias por ser eterna”
En la ceremonia, las mujeres de la dinastía Pinal tomaron la palabra para despedir a la madre, a la abuela y la bisabuela que fue apoyo e inspiración para una familia de artistas.
“Para el público mexicano es una gran pérdida, pero para nosotros su familia se va nuestra amada madre”, dijo Sylvia Pasquel con la voz entrecortada.
“Hablo del dolor que parte mi corazón al perder mi grande amor”, continuó la actriz, quien describió a su madre como “hermosa, tierna, simpática, ocurrente”.
“Vuela alto como siempre lo hiciste querida madre. Te amamos mucho, te decimos adiós con todo nuestro amor y todo nuestro corazón”, señaló.
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“Siempre me enseñó, y a todos, que este matriarcado tenía siempre magia, siempre arte, siempre cosas que llevaremos todas y creo que esa es la mejor herencia que puedo tener, esa casta, esa raíz”, dijo también visiblemente afectada Alejandra Guzmán.
“Madre te extraño te quiero, te amo, te respeto, te necesito pero te llevo aquí en mi corazón, Gracias por todo lo que me enseñaste, gracias por todo lo que compartimos, gracias por ser eterna”, dijo la cantante.
Sus nietas y bisnietas también dedicaron palabras de agradecimiento a la diva. “Sólo puedo darte las gracias por hacernos sentir amadas como mujeres y salir adelante sin importar nada”, expresó Stephanie Salas, mientras que su hija, Michelle Salas destacó: “Nos mostró que el verdadero poder está en nuestros valores, en nuestra determinación y en nuestra capacidad de amar profundamente.
Silvia Pinal, la última diva del cine nacional, falleció este jueves a los 93 años de edad tras haber estado hospitalizada una semana, confirmó Televisa, que fue su casa de trabajo por décadas.
“Su legado es infinito, porque no sólo nos dejó historias y recuerdos, sino un ejemplo vivo de cómo romper paradigmas y transformar el mundo con valentía y gracia”.
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Entre música sacra, boleros y mariachi, que acompañó a uno de los grandes amigos de Silvia Pinal, el cantante Humberto Cravioto, cientos de personas ingresaron al recinto para ver de lejos el féretro sobre el cual las mujeres de la dinastía se abrazaron para despedirse definitivamente de la matriarca.
La primera película de Silvia Pinal fue Bamba, donde tuvo una pequeña participación, pero compartió créditos con Carmen Montejo. Su camino continuó con cintas como El pecado de Laura, La mujer que yo perdí, La soldadera, Un rincón cerca del cielo y El inocente, en éstas dos últimas compartió créditos con Pedro Infante; en El portero, actuó con Cantinflas; y en El rey del barrio y Me traes de un ala, tuvo como coestrella a Germán Váldez, Tin Tan.
La Academia reconoció sus actuaciones con cuatro Arieles: en 1953, 1957 y 1958 como actriz, y en 2008 con un Ariel de Oro por su destacada trayectoria. Asimismo, fue galardonada con cuatro Diosas de Plata, incluyendo un premio honorífico en 2009.
El mundo de las telenovelas también se engalanó con su presencia, en títulos como Los caudillos, Lazos de amor, El privilegio de amar, Fuego en la sangre, Soy tu dueña, Mi marido tiene familia y Juntos el corazón nunca se equivoca.
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