Redacción El Coahuilense
Ciudad de México.- La llegada del 6 de enero anuncia un meticuloso trabajo de cacería de juguetes que no sólo implica el acto de buscar – comprar, sino también, ajustar horarios para esta actividad, producir ahorros con semanas de antelación y por supuesto, ejercer un trabajo de cuidados pasivos, usualmente, cargados por las madres de las infancias.
Según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), hasta 2023 habían 38.5 millones de madres, al menos la mitad de ellas, oscilan un rango de edad entre los 15 y los 29 años, asimismo, su adición al mercado laboral es cada vez más frecuente, por lo que al menos 44% de las madres mexicanas son económicamente activa, es decir, contribuye en los gastos del hogar.
El Inegi también detalló que, de las madres económicamente activas, 11 millones 474 mil 983 estaban reconocidas como jefas de familia. Es decir, en total, 33 de cada 100 hogares a nivel nacional eran liderados por una mujer, quienes el 6 de enero se convierten en las Reinas Magas de sus familias para lograr que una ilusión continúe vigente en medio de un mundo que está en deuda con las infancias.
De esto último deviene que, más que una tradición de corte dogmático donde los Reyes Magos pasan a ser figura de tradición, en un terreno específicamente político, hablar de Reinas Magas abre el margen para nombrar problemáticas sociales como por ejemplo, la paternidad presente -pero ausente-, la falta de corresponsabilidad, el trabajo de cuidados pasivos, la administración financiera de los hogares hecha por mujeres, la crianza desentendida de los padres que desconocen los intereses de las infancias y por supuesto, el trabajo de las jefas de familia que resisten a esta temporada ante una inflación sin tregua.
De madres autónomas, cuidados y el costo de un juguete
De acuerdo con el Frente Nacional de Mujeres contra Deudores Alimentarios, los padres ausentes dejan a sus hijas – hijos entre los 0 y 3 años de edad en un 83% de los casos; una etapa que exige un extenuante trabajo de cuidados, de alimentación, de veladas extensas, medicamentos y la dependencia de las infancias en sus primeros años de vida.
En nuestro país, al menos el 11% de las madres es autónoma y el 70% de ellas es económicamente activas, siendo ellas, la principal fuente de ingreso trimestral de su hogar. En añadidura, se nombran las jefas de familia por viudez (12%), separación (7) o divorcio (3%); el 78% de las madres jefas de familia se dedica al trabajo subordinado y un 18% al trabajo por cuenta propia.
Este sector de jefas de familia tiende a destinar hasta el 39% de su salario a los alimentos y apenas un 8% sobrante queda disponible para gastos de esparcimiento o educación, en esta sección, entra precisamente la compra de juguetes, ¿cuánta disponibilidad de dinero hay para que una mujer compre estas piezas?
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Consultando al Inegi, se registró que, al cuarto trimestre del 2023, el 46.7% de las jefas de familia recibía apenas el salario mínimo (207.44 pesos diarios) y el 31.3% poco más de un salario y rozando 2; sólo el 3.8% de las madres autónomas recibía más de tres salarios mínimos,
Con estas cifras, se entiende que la mayoría de las jefas de familia en nuestro país percibió un salario de 6 mil 223 pesos mensuales y que, como se advertía, se destinaron el 8% de sus ingresos para el esparcimiento de su familia lo que deja una cifra libre de mil 244 pesos mensuales para las Reinas Magas; apenas un indispensable para una muñeca de 629 pesos y una pista pequeña Hot Wheels de 469 pesos.
Estas estimaciones son un aproximado y se puede considerar que el ahorro dedicado a la compra de juguetes puede hacerse con meses de antelación, lo que podría duplicar e incluso, triplicar la cifra dedicada a los juguetes de los Reyes Magos.
Sin embargo, se debe reconocer que la inflación tampoco ha dejado el camino libre, pues de acuerdo con la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) el aumento de juguetes de este 2025 alcanzó el 25% y algunas piezas se han disparado enormemente, como por ejemplo, Lego que puede rozar los 2 mil 368 pesos o una Barbie en mil 610 pesos.
Ante este escenario de jefas de familia sosteniendo el 6 de enero con un salario mínimo -menor que el de sus congéneres-, es momento de nombrar el trabajo de administración de dinero que realizan las mujeres en nuestro país con el objeto de sacar un 6 de enero memorable de manera anual, así como reconocer que esta cacería de juguetes es un acto de cuidados; de mujeres que ajustan horarios laborales para poder comprar regalos, de aquellas que ahorran con meses de antelación, de quienes cuidan y conocen perfecto los deseos de sus hijas e hijos, de aquellas mujeres que realizan cuidados pasivos desde diciembre pensando en cómo lograrán un 6 de enero exitoso, a quién pedir prestado, cómo apretar la cartera y trazar un plan de acción exitoso.
Así, nombramos el poder de las Reinas Magas y evidenciamos la nula corresponsabilidad en los hogares de nuestro país.
De mujeres y su inteligencia financiera en el hogar
Sólo para darnos una idea de este extraordinario trabajo, la Encuesta Nacional sobre Salud Financiera (ENSAFI) se desarrolló a través del Instituto Nacional de Estadística y Geografía en colaboración con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), encontró que son las mujeres quienes tienden a manejar mejor sus finanzas personales, realizar decisiones más inteligentes y cubrir de forma más laxa las necesidades de su hogar, pues tienden a realizar registros en libretas de sus ingresos y gastos a diferencia de sus congéneres.
Sin embargo, a pesar de la estrategia de supervivencia financiera, esto no aminora la brecha salarial y termina golpeando su bolsillo con mayor incidencia a diferencia de sus congéneres, quienes reciben salarios más altos por la misma cantidad de horas trabajadas.
El 32.5% de ellas refirió que su dinero mensual no logró cubrir sus deudas, produciendo que las mujeres recurrieran a alguna de las siguientes situaciones:
- Reducir sus gastos
- Pedir prestado a familia y amistades
- Utilizar sus ahorros
Como dato extra, el INEGI encontró que esta falta de dinero a final del mes se recrudece aún más cuando la mujer es viuda, divorciada o separada, además, son ellas quienes refirieron padecer de problemas como colitis, insomnio y gastritis a causa del estrés que producen las deudas, una problemática extra que se une a lo que aqueja a las Reinas Magas de nuestro país.
Finalmente, al momento de dedicarnos a pagar deudas, los hombres consideraron 3 mil 382 pesos como el monto máximo para cubrir estas responsabilidades financieras sin comprometer su patrimonio mensual. Por su parte, las mujeres refirieron que su tope máximo para pagar deudas es de 2 mil 262, es decir una diferencia de mil 120 pesos mexicanos.
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