Redacción El Coahuilense
Torreón, Coahuila.- La persona encontrada sin vida la noche del pasado martes en el Centro de Torreón, era un profesor muy querido por la comunidad lagunera, tanto por alumnos como sus compañeros docentes.
Se llamaba Enrique Barajas Chávez y tenía 45 años, quien perdió la vida en el estacionamiento de una bodega ubicada sobre la avenida Presidente Carranza esquina con calle Blanco, en el Centro de Torreón, frente al Mercado de Las Flores.
Testigos indicaron que se desvaneció, se pegó en la cabeza y quedó inconsciente.
El cuerpo fue encontrado al lado de su camioneta tipo pickup en color blanco y con placas de circulación del estado de Coahuila.
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De acuerdo al informe de la Fiscalía, estaba en posición decúbito dorsal y solo se le apreció un golpe en la frente.
La necropsia arrojó:
“A) Anoxemia. B) Tromboembolia cardiopulmonar no traumática”.
Es decir, no tenía oxígeno en la sangre y sufrió un infarto pulmonar y cardíaco sin golpe asociado.
Al respecto, el Comité Ejecutivo de la Sección 35 del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE) expresó sus condolencias por el sensible fallecimiento del profesor.
“Deseamos a su familia y amigos pronta resignación y fortaleza ante esta gran pérdida. Enviamos un abrazo fraterno. Descanse en paz”, publicó en las redes sociales la Sección 35, a nombre de Arturo Díaz González, secretario general.
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Más amigos y conocidos se unieron a las muestras de cariño.
“Sigo totalmente en shock por tan lamentable noticia. Fue un honor ser tú alumna en Vizcaya y convivir con un ser lleno de tanto optimismo por la vida y la profesión compartida. Abrazo fraterno a toda su familia, Dios lo reciba con los brazos abiertos en el cielo”, Vale Segura Sosa.
“Un excelente maestro. Descanse en paz profe enrique”, Alondra Cueto.
El maestro, que también trabajó en la Secundaria Número 13 y fue alumno de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS), fue velado en funerales Aragón desde la noche del miércoles.
“Gran maestro y persona que conocí en la etapa universitaria. Gracias por cada enseñanza y por siempre estar alegre. Gracias por estar siempre que lo necesitamos, por los consejos que nos brindó”, Mara Rodríguez.
“Un excelente maestro y amigo. Siempre muy alegre y con la mejor actitud. Gracias por todas sus enseñanzas y por el apoyo que siempre nos brindó a mis compañeros y a mí. Dios lo reciba con los brazos abiertos. Gracias profesor. Se queda en los corazones de cada uno de sus alumnos, es y fue un privilegio haberlo tenido como mi maestro y amigo. Un buen maestro es como una vela, que se consume para alumbrar el camino a los demás”, Lesly Romo.
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